Nunca Quise Tener Un Hijo Suyo Novela capítulo 10

—Si vuelve a intentar algo así, no será divertido. Si lo hace una vez más, colgaré el cuello de su padre en la puerta de la ciudad —dijo.

—….

—El temperamento del rey no es tan bueno, ¿Lo ha visto?

—¿Me está amenazando?

—¿Amenazando? Bueno, a estas alturas ya debería poder aceptarlo.

Ella apartó la mano de Mikhail y se distanció.

—El señor es verdaderamente maleducado y vulgar.

—Piense lo que quiera.

Era como si pudiera verlo como quisiera. Emilia no bajó la guardia ante él y en cambio miró la comida en la mesa.

Había comida cuidadosamente dispuesta en la bandeja, pero no se veían cuchillos ni tenedores, como si le estuvieran diciendo que comiera con las manos.

“¿Me está diciendo que coma con las manos?”

Seguramente él no le había dado cuchillo ni tenedor. No importaba cómo fuera, no podía evitarlo. Ella no era alguien que no hubiera aprendido nada; no podía desgarrar la carne como una salvaje con sus propias manos.

Emilia von Loren, hija de la noble familia Loren y aristócrata de alto rango, no importaba cómo la hubieran nombrado caballero, no podía comer con las manos como una salvaje.

El rostro de Emilia palideció aún más. Le hizo un gesto al sirviente.

—No comeré, así que por favor llévenselo.

Ella no tenía elección en primer lugar ¿Verdad?

Se encogió de hombros como si esperara su reacción.

—Debe saber cuáles son las consecuencias de sus acciones para que no vuelva a molestarme.

¿Consecuencias? Su tono, como si estuviera hablando desde una posición superior, no le sentó bien.

—No soy una niña.

—Los niños no se cortan el cuello ellos mismos.

De repente, él extendió la mano y presionó firmemente su herida, provocando que ella se mordiera los labios y reprimiera un grito.

—Parece que todavía está viva.

Su expresión de alegría al verla luchar era escalofriante. Emilia no apartó su mirada desdeñosa.

Sus brillantes iris rojos, ya al borde de la locura, lo hacían parecer aún más trastornado.

—Es irónicamente contradictorio que tenga miedo de tener a su lado a alguien que odia, ¿No?

—Eso hace que sea más fácil vigilarla —dijo, como si no tuviera ninguna intención particular.

—¿Por qué vino aquí?

—Advertencia.

Su breve respuesta dejó a Emilia sin aliento. Incluso respirar era difícil ante su inexplicable intimidación.

—¿Qué le hace tener tanta confianza, teniendo en cuenta que es alguien que ha cometido traición?

—¿Qué tiene de diferente la familia Loren?

—¿...qué dijo?

Ante las palabras de Mikhail, las cejas de Emilia se fruncieron.

—¡No insulte a nuestra familia estando en contacto con traidores! Nuestra familia ha mantenido su autenticidad y nunca ha manchado su honor.

Mikhail se rió entre dientes ante sus palabras.

—¿En serio? ¿Es así, Emilia?

Emilia se quedó en silencio y luego lo miró fijamente con una mirada feroz.

Los iris carmesí chocaban con los verdes en el aire, y sus miradas mutuas eran firmes.

La tensión en la habitación, que parecía inquebrantable, se alivió con el sonido de un golpe.

—…

—…

Ninguno de los dos habló primero. No hubo respuesta de ninguno de los dos. Al no haber respuesta, el mayordomo habló desde detrás de la puerta.

—Duque, Lady Luther lo está buscando.

—¿Por qué razón? Bueno, estaré ahí enseguida.

Mikhail estaba a punto de preguntarle el motivo, pero se detuvo cuando vio a Emilia. No parecía el momento adecuado para una conversación así.

Ante la mención de Lady Luther, los ojos verdes de Emilia brillaron.

“La madre de Adrián.”

Esa mujer debió haber jugado bien sus cartas. Era del tipo que haría cualquier cosa para asegurar el lugar de su hijo en el trono.

—Piense bien lo que le dije.

Emilia se burló.

—Ni siquiera necesito pensarlo; es una tontería.

—Al verla reír, parece que puede arreglárselas aquí. No esperaba que los recuerdos de su primera experiencia se desvanecieran tan fácilmente.

—…la estimada Lady Luther lo está buscando, debería ir a verla rápidamente.

Se agachó, extendió la mano hacia el cabello de Emilia y pasó los dedos por él. Su toque le provocó escalofríos en la espalda y ella apartó rápidamente su mano.

—No me toque.

Ella le apartó la mano con brusquedad. Mikhail se rió entre dientes ante su reacción.

“Un caballero es un caballero, supongo.”

Sus manos no eran suaves y delicadas como las de otras mujeres. Carecían de la suavidad habitual y estaban desgastadas por el entrenamiento. Su mirada inquebrantable y su determinación inquebrantable también la diferenciaban.

Si se hubieran encontrado como aliados en lugar de adversarios, tal vez se habrían llevado bastante bien.

“¿En qué estoy pensando ahora mismo?”

Mikhail pensó que los pensamientos que tenía eran desdeñosos. Una vez más, la miró fijamente con sus ojos rojos.

—Olvidar fácilmente los recuerdos vergonzosos… solo puede haber una razón para eso.

Se sonrojó de vergüenza y todo su cuerpo tembló de humillación. Sus labios parecían dispuestos a proferir maldiciones, pero los cerró con fuerza.

Las emociones contenidas en los ojos verdes que lo miraban eran nítidas, pero a Mikhail no le importó. De hecho, se sintió más a gusto cuando recibió su mirada despectiva.

Traducido por: Valiz

◈❖◈

Si te gustó, Puedes apoyarnos aquí ~  [http://www.paypal.com/paypalme/MangoNovelas]

http://www.paypal.com/paypalme/MangoNovelas

También contamos con página de facebook ~ [https://www.facebook.com/MangoNovelas]

https://www.facebook.com/MangoNovelas

También visítanos en TikTok ~ [https://www.tiktok.com/@mangonovelas]

https://www.tiktok.com/@mangonovelas