Me Encanta Destruir La Trama De Los Mundos Novela capítulo 60

En la habitación del hotel.

Con el sonido del vómito de Meng Lan de fondo, Mo Yijun miró a su esposo, que tenía la locura en los ojos y el cuerpo cubierto de sangre. Por la escena que tenía ante él, la sangre parecía ser de Cao Junzi, estába salpicada en el suelo como si fuera carne molida.

La única diferencia era que la carne molida se movía por sí sola y volvía lentamente a su forma original como Cao Junzi. Mo Yijun estaba tan sorprendido que su mente estaba en crisis, Ye Xiajie tuvo que hacerse cargo del cuerpo mientras sus ojos plateados se volvían completamente negros. Ye Xiajie no mostró sorpresa en su rostro ya que solo pudo sonreír amargamente ante las acciones de su esposo.

Suspiró por un momento.

—Hah~ exageraste, esposo —respondió Ye Xiajie mientras chasqueaba los dedos, invirtiendo el tiempo del mundo entero.

Por supuesto, incluso Meng Anya, Meng Lan y Cao Junzi se vieron afectados, solo Mo Yijun no se vio afectado. Los recuerdos de Meng Anya no se borraron ya que era un extraño en ese mundo, aunque su cuerpo no se salvó de la inversión del tiempo.

El tiempo se revirtió y todo se deshizo. Incluso la píldora Zerg que Anya le dio a Cao Junzi fue reembolsada y devuelta al sistema. Ye Xiajie incluso selló los recuerdos de Mo Yijun viendo a Anya cubierto de sangre. La escena volvió a la parte donde se suponía que Anya estaba debajo de Cao Junzi.

Una vez que el tiempo volvió a la normalidad, Ye Xiajie actuó como si acabara de llegar ante Meng Lan y fuera testigo de la escena en la que Cao Junzi estaba a punto de violar a Meng Anya. Inmediatamente sacó a Junzi del cuerpo de su esposo y cubrió la apariencia desordenada de este último con una manta para ocultarlo de los demás. Aunque la razón era porque no quería que este último luchara y lo dejara en medio de la ira.

Después de todo, hizo su movimiento para reservar su tiempo sin su permiso. Además, Anya no pudo escapar de su hechizo porque lo hizo cuando la tomó por sorpresa. Una vez que Cao Junzi fue expulsado de la habitación, Meng Lan y los demás llegaron.

Al ver a Cao Junzi semidesnudo y a Mo Yijun abrazando de manera protectora a Meng Anya, quien estaba completamente cubierto con una manta, supieron lo que sucedió. Cao Junzi intentó violar a Meng Anya y, afortunadamente, Mo Yijun llegó a tiempo para salvarlo.

Meng Huang preguntó preocupado:

—Yijun... ¿Cómo está mi hijo?

—E-Está drogado. Necesito... por favor, saquen a mi suegro —respondió Mo Yijun.

Xue Ling y el ministro, al comprender sus palabras, sacaron al padre cariñoso de la habitación. Junto con ellos, el estupefacto Meng Lan, vestido con harapos, se despidió. Cerraron la puerta de la habitación, incluso la cerraron con llave. Tan pronto como las otras personas se fueron para darles privacidad, Meng Anya se liberó de la manta que lo cubría e incluso se quitó con fuerza los brazos que lo rodeaban.

Cuando Ye Xiajie intentó abrazarlo una vez más, solo pudo detenerse cuando escuchó el tono sin emociones de su esposo llamándolo por su nombre y su rostro sin emoción.

—Suéltame, Ye Xiajie —dijo Meng Anya, su voz era completamente indiferente.

Ye Xiajie sabía que estaba enojado y no se atrevió a ir en contra de su esposo. Observó cómo Meng Anya ignoraba su presencia y caminaba hacia el baño, incluso cerrando la puerta con fuerza. Escuchó un fuerte sonido de la puerta al cerrarse. Luego escuchó sonidos de ducha y supo que su esposo se estaba bañando.

Sólo cuando el baño se estaba alargando demasiado (incluso duró más de una hora) Ye Xiajie caminó hacia el baño para convencer a su enojado esposo. Escuchó el sonido de alguien vomitando dentro de la habitación y supo que algo andaba mal con su esposo. Corrió al baño preocupado. La escena dentro lo devastó.

Vio a su esposo todavía vestido y dentro de la ducha de rodillas mientras vomitaba todo lo que tenía dentro del estómago. Incluso se agarraba el cuello con tanta fuerza que se le rompió la piel y empezó a sangrar. Es como si quisiera rascarse la parte interna de la garganta para no vomitar pero no pudo.

Vómitos y sonidos de agua cayendo.

Al ver el estado actual de su esposo, Ye Xiajie sintió un inmenso dolor en el pecho. Entró con fuerza en la ducha y lo abrazó. Ignoró el vómito y todo lo que estaba en el suelo mientras agarraba las manos de su cuello para evitar que se hiciera más daño. Esperaba que se resistiera en su abrazo, pero solo sintió su suave cuerpo caer sobre él. Podía escucharlo gimiendo.

—Huhu~ Me siento tan repugnante... Esposo~ Es tan repugnante. ¿Por qué...? ¿Por qué no me dejaste matarlo~? —dijo Meng Anya mientras lloraba y temblaba en los brazos de su esposo.

Los sollozos de su esposo resonaron dentro del baño, lo que casi vuelve loco a Ye Xiajie. Solo podía abrazarlo sin saber la razón por la que estaba actuando de esa manera. Sabía que no había pasado nada malo entre Meng Anya y Cao Junzi, ya que vieron claramente a Anya cubierto de sangre golpear a este último hasta matarlo.

Su esposo era fuerte y nunca permitiría que otros lo tocaran. De hecho, tenía razón en que Hei Anjing era fuerte. ¿Quién podría haber esperado que Hei Anjing fuera reacio al contacto físico? Con la única excepción de los miembros de su familia y Ye Xiajie, nadie podía tocarlo íntimamente. Mientras la ropa lo separara de los demás, los abrazos estaban bien. Un breve apretón de manos también estaba bien. Es por eso que cuando Meng Huang abrazó a Meng Anya, no mostró ningún signo de rechazo ya que había ropa entre ellos.

Pero una vez que un extraño intentaba tocar su cuerpo directamente o tocarlo íntimamente más allá de su ropa, Anjing se enojaba. Es por eso que cuando Cao Junzi puso directamente su mano dentro de su ropa y lo tocó como lo hacía su esposo, su rechazo estalló. Esa era la razón por la que Hei Anjing quería matar a Cao Junzi, aunque sus nervios tranquilos le impidieron hacerlo por temor a fallar en su tarea y verse obligado a abandonar el mundo.

Separarse de su marido y perder su tiempo para estar con él hizo que reprimiera la repulsión en su corazón. Las acciones de Ye Xiajie de revertir el tiempo hasta el punto en que sintió que Cao Junzi lo tocaba una vez más hicieron que su última restricción se rompiera debido al asco extremo en su corazón, lo que resultó en la escena que Ye Xiajie estaba presenciando en el baño.

Parecía como si hubiera algo que tenía traumatizado a Anjing, oculto dentro de los recuerdos sellados pero que su alma aun recordaba.

Ye Xiajie ya no podía soportar los gritos de su esposo y solo pudo obligar a Meng Anya a dormir. Después de bañarlo y quitarle la ropa sucia, cubriéndose solo con una bata, lo llevó a la cama para que descansara. Verlo llorar incluso mientras dormía hizo que Ye Xiajie se sintiera completamente incómodo. Solo podía preguntarle al único ser que había sido testigo de lo que le sucedió.

—Verdugo 0013. ¡Preséntate! —ordenó Ye Xiajie.

El Verdugo del Sistema apareció cuando fue convocado por alguien del más alto mando.

—0013 a su servicio.

—Dime, ¿Por qué mi esposo reaccionó así? —preguntó Ye Xiajie.

El Ejecutor del Sistema 0013 se quedó en silencio por un momento.

—Este... este Verdugo no lo sabe. Pero parece que el anfitrión tiene un problema con el contacto íntimo con extraños. Creo que es mejor que el Señor lo vea por sí mismo.

Solo cuando sintió la mirada fulminante de Ye Xiajie, mostró un video de la escena en la que la reacción de Meng Anya fue grande. Ye Xiajie vio la grabación y no pudo evitar fruncir el ceño al terminar de ver el video. Cuando vio la reacción adversa de su esposo en la grabación, supo que realmente le había hecho daño por impedirle matar a Cao Junzi.

Según el video, podía ver que Hei Anjing sentía una aversión al contacto físico. Una vez que otra persona, además de algunas excepciones como él y su linaje directo, lo tocaba, se revelaba su reacción. Sus acciones de revertir el tiempo a la escena donde su rechazo estaba en su punto máximo empeoraron las cosas.

No solo esa acción hizo infeliz a su esposo, sino que lo hizo sufrir dos veces debido a su rechazo extremo y su disgusto, lo que lo llevó a autolesionarse. Ye Xiajie no pudo evitar querer castigarse a sí mismo por lo que había hecho. Indirectamente activó el trauma oculto que tenía su esposo.

Ye Xiajie le dijo al verdugo:

—Puedes irte. —El pequeño sistema regresó a su espacio y desapareció una vez más.

Con una mano temblorosa, Ye Xiajie acarició suavemente la mejilla fría de su esposo.

—Jing-er, te he hecho daño —murmuró Xiajie mientras miraba a su esposo dormido a su lado.

Una vez que terminó de curar los rasguños en su cuello, bajando la cabeza, Xiajie depositó un beso en la frente de Anya suavemente.

—Lo siento —susurró.

Una lágrima descendió inconscientemente de sus ojos de obsidiana teñidos de profundo arrepentimiento y culpa, cayendo suavemente sobre las mejillas de Meng Anya.

Traducido por: Valiz