Me Encanta Destruir La Trama De Los Mundos Novela capítulo 2

Primera Pequeña Estrella - El comienzo

Primera Pequeña Estrella - El comienzo

En el Sistema del 13° Verdugo.

—Anfitrión, ha seleccionado la primera estrella. Por favor, selecciona una habilidad antes de entrar al mundo. Seleccione una habilidad de la lista mostrada a continuación.

Lista de Habilidades:

Lista de Habilidades:

1. Actuación

2. Comunicación.

3. Hackeo.

4. Arte en la Seducción.

—Anfitrión, por favor, seleccione una habilidad.

Después de leer la lista, Hie Anjing río.

—¡Jaja! ¡Incluso hay una habilidad para la seducción! Esta lista contiene habilidades raras. De todos modos, elijo la habilidad de Actuación porque me vendría bien —respondió para después recibir la habilidad.

Después de esperar un momento, una puerta apareció.

—Anfitrión, esta es la puerta para entrar al espacio de entrenamiento. Dentro del área de entrenamiento el Anfitrión será instruido en relación con la habilidad seleccionada. Por esta vez, el Anfitrión ha seleccionado la habilidad de Actuación. Cien años dentro de la habitación de entrenamiento equivale a una hora en el Sistema. Así que el Anfitrión no tiene por qué preocuparse. Por favor, entre a la sala de entrenamiento para aprender actuación.

—¿Eso es todo? —replicó con indiferencia.

La puerta no muy lejos de Hei Anjing se abrió lentamente mientras se acercaba. Con una astuta sonrisa mostrada a través de la comisura de sus labios, Hei Anjing abrió la puerta y entró en la sala de entrenamiento sin vacilación ni miedo. Solo había una incuestionable confianza proveniente de él.

Media hora más tarde, la puerta de la sala de entrenamiento volvió a aparecer. Esta vez Hei Anjing salió de la puerta como si nada hubiera cambiado en él. Pero el Sistema sabía que su Anfitrión había aprendido las habilidades de Actuación. No había necesidad de preguntar por qué había tardado 50 años en dominar la habilidad.

Hei Anjing miró al Sistema con una divertida sonrisa impregnada en su hermoso rostro. Tomó la estrella que había elegido y la apretó.

—Anfitrión, por favor, prepárese para ser transferido en 10…9…8…7…6…5…4…3…2…1.

Hei Anjing, que estaba sosteniendo una pequeña estrella en su mano, fue absorbido por el proceso de transferencia del Sistema. Solo le tomó un momento para que su alma fuera transferida del espacio de su Sistema al cuerpo que tendría en la estrella seleccionada. Una vez su alma estuvo completamente sincronizada con el cuerpo de ese mundo. Hei Anjing tomó el control de aquel cuerpo.

La transferencia no tomó mucho tiempo, Hei Anjing solo sintió que una oscuridad lo envolvió por un momento solo para ser puesto en otro lado. Intentó abrir sus ojos, pero por alguna razón el cuerpo en el que se encontraba estaba demasiado cansado como para moverse, complicandole la tarea de abrir sus ojos inmediatamente. El estado actual de sus ojos solo podían ser descritos como hinchados por el llanto. Incluso fue doloroso intentar moverlos.

—¡Ying…Xia Ying! ¡Despierta!

La voz de un hombre llamaba a Hei Anjing. Se podía oír la irritación en su voz con tan solo escuchar el tono de aquella persona.

Lentamente abrió sus ojos. Hei Anjing vio su reflejo en la ventana frente a él. La figura y sus características no eran completamente claras, pero pudo ligeramente ver su actual apariencia. En el estado que se encontraba ya no como su alma, si no que en el cuerpo de alguien más.

El cuerpo en el que se encontraba tenía iris plateados, que fueron revelados en el momento en que abrió los ojos. Como si la luna finalmente se hubiera mostrado después de haber sido cubierta por nubes. Suave cabello rubio y un rostro frío, pero hermoso. No se veía frágil, lo que no era malo. Aquella era la apariencia que ahora tendría Hei Anjing.

—¡Ying…Xia Ying! ¡Despierta!

Se dio la vuelta para mirar al dueño de la voz gruñona que estaba llamando a aquel cuerpo. Ese hombre parecía estar llamándolo a él. Xia Ying. Ese debe ser el nombre del cuerpo en el que se encontraba. Cuando Hei Anjing vio al dueño de la voz, no pudo evitar levantar las cejas ligeramente sin ninguna emoción en su rostro.

Un hombre que vestía de traje, que parecía estar enojado y que lo miraba disgustado. Un hombre gruñón, que estaba tratando de despertarlo.

Luego, miró a su alrededor. Tomando nota de las cosas dentro de la habitación, Anjing se dio cuenta de que estaban dentro de una especie de habitación de hotel de lujo. Entonces vio al hombre dentro de la habitación arreglando su ropa y preparándose para irse. Era obvio por sus acciones que el hombre no estaba dispuesto a esperarlo.

Hei Anjing finalmente se sentó en la cama y comenzó a ponerse su ropa. Su ropa estaba esparcida en el suelo y obviamente había sido aventada. Al ver las claras huellas de amor que marcaban su cuerpo, supo lo que había hecho el propietario original de aquel cuerpo.

De mal humor, Hei Anjing decidió tomarse un momento después de ponerse su ropa. Por supuesto, no dejó que su estado de ánimo real se mostrará en su rostro. Observó al hombre ante él.

Estructura corporal alta y esbelta. Aspecto ligeramente atractivo y rasgos un poco refinados. Un rostro que podría ser exhibido en público. Emite una arrogancia de estar en la cima y la confianza para regir a un público, pero no hasta el punto como para conmover a alguien como Hei Anjing que era noble de nacimiento. Claramente, este hombre es una persona de la industria del entretenimiento y muy popular.

Una persona adecuada para ser llamada un dios masculino. Si no fuera por ese ceño fruncido en su rostro mientras miraba fijamente a Hei Anjing, su apariencia sería casi perfecta. Todo era perfecto excepto por esos ojos de zafiro que mostraban indicios de aversión y remordimiento mientras miraban hacia abajo, a Hei Anjing, quien se acababa de despertar y que ahora se encontraba tranquilamente en la cama. El odio y el disgusto no podían ocultarse por la forma en que miraba a Hei Anjing.

La cara de Hei Anjing no mostraba ninguna emoción en su rostro, incluso cuando vio que el hombre lo miraba con desprecio como si fuera una especie de error. Actuaba como si se hubiera despertado, actuaba como si no hubiera pasado nada y al mismo tiempo se mantenía en silencio. Continuando en silencio, Hei Anjing observó al hombre que lo miraba con molestia en sus ojos.

—Exe, ¿Quién es el…? —preguntó Anjing en su mente.

—Anfitrión, esa persona es el protagonista de esta estrella, el Gong (N/T: Gong es el Uke, el que da.). El actual Emperador del Cine, Lu Ziyun. Estamos más allá del marco de tiempo donde el protagonista Gong tuvo una conversación con Xia Ying queriendo terminar su relación. Antes de que el alma del Anfitrión entrará en el cuerpo, el Xia Ying original aceptó la ruptura sin preguntas, pero el Xia Ying original pidió una última noche a pesar de la aversión del protagonista Gong. Por eso el protagonista Gong está mirando a Xia Ying con tanto disgusto y pesar.

—¡Qué bastardo! Comió y todavía tiene un rostro de arrepentimiento. ¡Mierda! Con razón este cuerpo duele por todas partes. ¡Tsk! Exe, dame los recuerdos de este cuerpo.

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Trama de Xia Ying en el Mundo:

Trama de Xia Ying en el Mundo:

Xia Ying. Hermano gemelo mayor de Xia Yang. Es llamado el gemelo Luna, que es lo opuesto al Shou, el Protagonista, el hermano gemelo Sol. Estos gemelos nacieron con diferentes personalidades. Uno es brillante mientras que el otro es sombrío.

Ambos son actores, bastante populares debido a su personalidad contradictoria, pero el protagonista Shou (N/T: Shou es el uke, el que recibe.) es el más amado por los fans y la gente de la industria a diferencia de Xia Ying, que a menudo se ve envuelto en malentendidos acusado de ser grosero por su temperamento silencioso, catalogándolo como una persona sin emociones y de corazón frío.

Xia Yang, el protagonista Shou, no tiene mucho talento para la actuación. Su actuación es de segunda categoría, mientras que su hermano gemelo, Xia Ying tiene más talento que él. Pero debido a la actitud brillante de Xia Yang, la mayoría de la gente se pone de su lado, aunque sus habilidades de actuación sean mediocres.

Xia Ying es lo contrario. Por lo general, es tranquilo y su comportamiento es silencioso, a menudo es malentendido por las personas. Así que, incluso si tiene talento, a los demás no les gusta mucho.

Incluso el actual Emperador del Cine, Lu Ziyun está enamorado de Xia Yang. Temeroso de destruir su carrera, tomó a Xia Ying como su sustituto.

Xia Ying originalmente creía que era amado por ese hombre, sin saber que fue solo un sustituto hasta que Lu Ziyun le pidió que se hiciera responsable de un escándalo en lugar de su hermano, que fue encontrado bebiendo en un bar gay.

Creyendo que Lu Ziyun estaría ahí para protegerlo, Xia Ying aceptó el escándalo y ahora se esconde en el condominio secreto de Lu Ziyun, pero él le sumó otro escándalo, el de seducir al Emperador del Cine, lo que destruyó su carrera y terminó por quitarse la vida.

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—¿Y según lo que acabas de decir, este es el cuerpo de Xia Ying? ¿En qué evento estamos...? —preguntó Hei Anjing. Su conversación seguía llevandose a cabo en la mente de Anjing.

—Anfitrión, usted está a punto de presenciar el escándalo de seducir al Emperador del Cine. El original murió mientras dormía, debido a la depresión extrema y el Anfitrión se apodero del cuerpo vacío tan pronto como su alma se fue. Advertencia para el anfitrión. Este lugar estará lleno de periodistas en media hora. Su tarea es cumplir el sueño del anfitrión original convirtiéndose en el Emperador del Cine.

—¿Eso es todo? Convertirme en el Emperador del Cine...

—Sí, Anfitrión. Esa es la única tarea de esta estrella. Ya que esta estrella está casi muerta. Como compensación al completar la tarea se le dará al Anfitrión la energía del mundo para el fortalecimiento del alma.

Al escuchar lo que decía su Sistema, Hei Anjing sonrió. A partir de ese momento Hei Anjing será llamado Xia Ying. Lu Ziyun miró a Xia Ying con el ceño fruncido al notar que este tenía una sonrisa en el rostro. Su corazón se sintió aturdido. Aquella sonrisa fue algo que nunca había visto antes porque la persona frente a él era conocida por ser fría como el hielo. Un robot en forma humana. Cuando Lu Ziyun vio su sonrisa por primera vez, no pudo evitar que su corazón latiera rápido.

A pesar de que era solo una sonrisa llena de fatiga, como si estuviera aceptando un destino que no era para él. En Xia Ying, aquella sonrisa seguía siendo una expresión rara y hermosa en su rostro, lo que hizo que el corazón del Emperador del Cine latiera más allá de su control. Lu Ziyun se sorprendió cuando vio que la sonrisa se desvanecía y se convertía en una expresión de dolor innegable. Entonces oyó un llanto silencioso proveniente del hombre cuya única sonrisa se apoderó de su corazón. Aquella belleza fría ante él lloraba por primera vez en su presencia. Sus afectos negativos hacia esa persona no pudieron evitar fundirse en tales circunstancias. Por primera vez, los sentimientos de preocupación e inquietud fueron algo que sintió gracias a Xia Ying.

—Yo… yo... lo sien-to... es so-lo que me gusta Lu-ge... mucho. —Sollozó—. A-sí que... yo... ha-ré... lo que... Lu-ge quiera... de-jaré... —Lloriqueó—...de molestarte... L-u-ge puede... concentrar-se en gus-tarle a A-Yang... en lugar de eso... yo… —La voz de Xia Ying sonó sorda y adorable.

(N/T: Nombre-ge: honorífico usado para referirse a un hermano mayor, no necesariamente de la misma sangre. - A-nombre: se usa para expresar familiaridad y apego. Solo se usa para personas cercanas.)

Xia Ying al tener lágrimas deambulando interminablemente por sus plateados ojos logró que su comportamiento frío se derritiera convirtiéndose en algo similar a una delicada belleza. Se veía tan frágil e inocente que cualquiera que viera su estado actual se sentiría intimidado por esa pequeña hermosa Hada ante ellos. Lu Ziyun, como era de esperarse, no pudo evitar acercarse a esa adorable persona.

Al instante lo abrazó, intentando consolarlo. Mientras lo hacía, sintió un dolor intangible dentro de su pecho, su corazón latió tan rápido cuando vio la figura de Xia Ying llorando. Si era culpa o emoción, Lu Ziyun no lo supo. En ese momento, Hei Anjing parecía muy débil y frágil. Su frío comportamiento se desvaneció revelando la inocencia de alguien que fue intimidado hasta el punto de llorar. Por primera vez, lamento haberlo hecho infeliz.

—Xia... Ying-er... no llores. Es culpa de tu hermano. Yo... yo... solo…—respondió Lu Ziyun sin saber que decir, ya que no podía entender por qué sentía un inmenso dolor al verlo llorar entre su abrazo.

(N/T: Nombre-er: honorífico usado para expresar ternura y cariño.)

—¡Vete, Lu-ge! —Sollozó—. Yo… yo... no quiero es-to... más... Amas A-Yang. No pue-do... tomar más culpa... en su lugar. Es solo que amo mucho a Lu-ge... por eso.... haré... cual-quier cosa por ti pero... no puedo... hacerlo... nunca más…—replicó Xia Ying con lágrimas en los ojos mientras luchaba por liberarse de los brazos que lo envolvían.

Aterrado por las luchas repentinas del hombre entre sus brazos, su agarre se apretó. Lu Ziyun deseaba detener la lucha de este último solo para que esa persona llorara con tanto dolor en sus brazos sin saber qué hacer.

—D-eja de llorar... tu hermano tiene la culpa. Yo… arreglaré todo. Deja de llorar Ying-er...

Fue en ese momento en el que los reporteros invadieron la habitación irrumpiendo dentro y tomando fotos de los dos. Lo que sorprendió a ambos.

—Emperador del Cine, ¡¿Qué quiere decir con arreglar todo?! ¡¿El escándalo de encontrar al actor Xia Ying en ese bar y no al actor Xia Yang?!

—¿Ha estado usando a Xia Ying para encubrir los escándalos de Xia Yang todo este tiempo?

—¿El Emperador del Cine es gay?

Tomado por sorpresa, Lu Ziyun ni siquiera pudo responder a ninguna de sus preguntas, estaba dudando en si responder con la verdad o no. Amaba tanto a Xia Yang que no podía destruirlo gracias a un error que cometió, pero al mismo tiempo no pudo decir nada para empujar a Xia Ying al frente a soportar un pecado que nunca cometió. Al menos esta vez no pudo hacer nada que dañara a Xia Ying. Era adorablemente ingenuo, y su frío exterior no era más que una máscara. No podía decidir a quién realmente quería proteger por lo que su corazón comenzó a vacilar.

Antes de que pudiera dudar de sus sentimientos, alguien más tomó una decisión en su lugar. Fue entonces cuando sintió que Xia Ying jalo su ropa, lo que le hizo mirarlo. Esa hermosa Hada le sonrió amargamente como si aceptara su destino, esa dolorosa sonrisa apuñaló su corazón con inmenso dolor. Lu Ziyun estaba aturdido. Solo pudo ver a Xia Ying dejar sus brazos susurrando unas palabras que solo él pudo escuchar.

—Lu-ge, esta será la última vez. Puedo ayudarte…—Aquella voz suave y gentil le susurró a su oído suavemente.

Lu Ziyun solo podía ver a Xia Ying caminar hacia los reporteros aceptando todas aquellas conjeturas que nunca debió haber aceptado desde un principio. Aquella situación había sido provocada por Xia Yang, pero eligió dejar que Xia Ying asumiera toda la culpa. Todo gracias a él. Porque quería proteger a Xia Yang. Xia Ying, que lo amaba con todo su corazón decidió proteger a la persona que amaba a cambio de su propia reputación. Con una sonrisa agraviada pero exquisita en su rostro, Xia Ying se enfrentó a los periodistas.

Hubo un silencio repentino ante su presencia, parecía que en señal de respeto, pero lo cierto era que todos estaban en trance. Aquel infame príncipe de hielo de la industria estaba ahora ante ellos con una sonrisa que habían visto por primera vez. Había rastros de enrojecimiento en la esquina de sus ojos, que se habían hinchado por un llanto constante. Su voz era amortiguada y ronca pero suave a los oídos. Esa sonrisa que estaban viendo, sin embargo, era extremadamente hermosa, solo podían sentir una gran tristeza y agonía en ella.

—Yo... en realidad yo era la persona en el bar. —Mordió sus labios inferiores hasta que sangraron—. Ese escándalo... era... realmente yo y no Xia Yang. Lu Ziyun no es gay. Fui yo quien lo obligó a estar conmigo. Soy gay. Yo... lo siento…—dijo Xia Ying.

Inclinó la cabeza y después levantó la mirada hacia las cámaras una vez más antes de despedirse.

Una lágrima cayó de esos ojos brillantes, pero esa sola gota hizo que todos sintieran cuánto sufrimiento estaba soportando. Aceptó toda condena usando sus labios, pero sus ojos lo traicionaban. Sus ojos mostraban la determinación de querer proteger a aquellos por quienes se preocupaba, aunque a cambio de ello, causara su propia destrucción.

Esos ojos plateados mostraban la verdad, pero aquella adorable e ingenua Hada pensó que nadie se daría cuenta. Los reporteros se dieron cuenta, la audiencia lo supo, cualquiera que haya visto su expresión entendió una sola cosa. Que estaba mintiendo, y lo hacía porque quería proteger a alguien.

Luego bajó la cabeza delante de las cámaras como si les rogara que lo perdonaran. Xia Ying les dio una última mirada a los camarógrafos antes de prepararse para despedirse.

Al ver que Xia Ying se alejaba cada vez más de su línea de visión, Lu Ziyun no pudo evitar llamarlo por su nombre.

—¡Ying-er!

Lo llamó, pero nunca volteo. Solo lo vio estremecerse, pero nunca volvió la cabeza para mirarlo. Su espalda mostraba su decepción y tristeza, así como su resolución. Incluso hacía caso omiso a las palabras del hombre que solía amar y que ahora mismo lo llamaba cariñosamente por su nombre.

—L-o siento pero por favor... ¿Podrían dejarme pasar? —preguntó con una temblorosa voz en dirección de los reporteros que se habían puesto en su camino. Xia Ying dejó el lugar bajo la mirada gentil de todos.

Solo pudieron dejarlo ir porque la expresión en el rostro de Xia Ying era extremadamente agonizante, incluso para aquellos que lo veían. Todo el mundo solo pudo ver como Xia Ying se iba.

Una vez que desapareció del lugar, todos los periodistas irrumpieron para entrevistar a Lu Ziyun, con una expresión de disgusto en sus rostros. Los periodistas no eran tontos. Los fans no eran ciegos. Pudieron ver que Xia Ying les está mintiendo con tal de proteger a alguien.

Si Xia Ying quería proteger a alguien del escándalo de aquel bar, solo había dos personas que se benefician de ello. Tenían a alguien en mente y uno de ellos estaba justo delante. El Emperador del Cine, Lu Ziyun.

Sin mirar hacia atrás mientras se iba, la expresión de tristeza de Xia Ying desapareció inmediatamente cuando salió de la habitación. Esa expresión que dejó a todos sin palabras no fue más que una actuación.

Aquella figura de pequeña y frágil belleza que modeló a una persona que fue victimizada y se permitió ser utilizada ya no existía. Xia Ying quiso controlar a los reporteros para que grabaran el desprecio que Lu Ziyun tenía por él.

Trató de cubrirlos aceptando la petición de Lu Ziyun de proteger a Xia Yang de los reporteros. Pero con su actuación pudo dejar que la gente supiera la verdad y así limpiar su reputación indirectamente también.

La expresión en el rostro de Xia Ying cambió de una delicada Hada llorando a una mirada distante, una atractiva sonrisa y una expresión juguetona.

Todo su ser estaba cubierto de indiferencia y desolación. Su atmósfera era fría y sin emociones a pesar de que sus ojos se encontraban llenos de alegría, la profundidad de aquella mirada solo mostraba desdén, como si mirara con desprecio todo a su alrededor. Sin ningún interés por las posesiones mundanas.

—Bueno, ¿No fue muy fácil? Descubrir que el Emperador del Cine está a ese nivel… Heh. —Xia Ying murmuró, mostrando su verdadera personalidad.

Esa era la verdadera forma de ser de Hei Anjing. Un pequeño demonio juguetón.

Solo que no esperaba que en la esquina de ese pasillo alguien más viera su verdadero rostro, provocando que aquella persona pensara que era un doble cara. Una esquina que ni siquiera Xia Ying había notado. Había estado ocupado conversando con su Sistema en su mente.

Aquel hombre alto era tremendamente cautivador, con un aura dominante, que tomaba el papel de escudo. Como un rey que gobierna una nación. Sus expresiones eran apáticas, y sus ojos grises observaban la figura de Xia Ying con curiosidad y alegría. Este hombre no es más que el famoso Emperador que poseía la compañía Empire Entertainment. La compañía de entretenimiento más grande del país. Huangdi, Wang Tian.

Aunque no tenía intención de ocultar su presencia, aquel hombre había presenciado toda la escena desde la distancia. Acaba de dejar su habitación reservada en aquel hotel y no esperaba que el Emperador del Cine de su compañía, Lu Ziyun y el Príncipe de Hielo estuvieran envueltos en un escándalo.

—Y pensar que el joven que es considerado como el Príncipe de Hielo en nuestra industria es un diablillo disfrazado. Su talento como actor está incluso por encima del de Lu Ziyun. ¿Se estará divirtiendo? —dijo el secretario Yi, que fue testigo de todo el asunto cuando vino a cumplir con su deber como el hombre de confianza del presidente.

—¿Lo conoces? —preguntó el presidente con un rostro frío.

—Bueno, es un artista de su compañía, señor.---respondió su secretario con una sonrisa tonta en su rostro.

—¿Es eso así? Interesante —dijo el presidente mientras se alejaba después de haber seguido con la mirada la dirección por donde se fue Xia Ying.

Se fueron tranquilos, como si lo que acababan de presenciar fuera un acontecimiento normal. Xia Ying ni siquiera se había enterado de que había adquirido el interés de alguien.

Esa noche, el Emperador del Cine, Lu Ziyun, después de huir de las bandadas de periodistas, se dirigió a casa. El lugar que compró para Xia Ying. Un condominio que se supone que era su lugar secreto, pero antes de que se creara el escándalo en el que ahora estaba envuelto, pocas veces había ido.

Xia Ying se fue a vivir ahí después de que se lo pidió. La urgencia se asentó en sus apresurados pasos y la fuerza que usó para abrir la puerta tampoco fue débil. Una vez que entró en el condominio, Lu Ziyun solo fue recibido por una habitación vacía.

—Ying-er, ¿Ying-er? ¡¿Estás en casa, Ying-er?! —Lu Ziyun lo llamó, pero nadie respondió.

Las luces del interior estaban apagadas. No había rastros de alguien viviendo aquí, en cambio, pocos rastros de alguien que se fue con prisa se quedaron atrás. Como la toalla tirada en el suelo alfombrado, o aquel cardigan para andar por casa colgando del perchero cerca del pasillo. Lu Ziyun corrió por todo el lugar, revisando cada habitación del condominio solo para notar que los rastros Xia Ying habían desaparecido por completo.

La taza y los utensilios que usaba fueron desechados. Su ropa en el armario ya no estaba. Incluso las revistas de moda personales que lo presentaban como el Emperador del Cine se quedaron atrás. Al ver el lugar vacío, Lu Ziyun se sentó en el frío sofá de la sala de estar. Por primera vez sintió que esa casa era un lugar en el que nadie vivía.

La soledad y la desolación se podían sentir a través del silencio y el vacío de aquel lugar. Es como si nadie viviera ahí.

Cayendo en sus profundos pensamientos, Lu Ziyun recordó la escena de esa mañana. Su rostro lloroso. Una sonrisa ingenua pero pura. Su belleza se había ocultado detrás de ese comportamiento frío. Solo cuando el hielo se rompió fue que Lu Ziyun fue capaz de ver que una persona tan silenciosa y fría era capaz de tener un corazón cálido. Leal a su amor, haría cualquier cosa por él.

Pero al final, estuvo tan ciego. Usó el amor de Xia Ying por él para protegerse. Hiriéndolo innumerables veces hasta que quedó completamente roto. Pero fue demasiado tarde cuando se dio cuenta. Después de todo, la pequeña Hada tuvo suficiente y decidió dejarlo. Aquella basura de hombre que lo utilizó como sustituto de otro.

Mientras se regodeaba en su dolor oyó caer algo. Se escucharon los sonidos de un cristal rompiéndose, mirando a través de la oscuridad, encendió las luces en la sala de estar buscando lo que se había caído.

Sólo entonces vio que un marco de fotos cayó del estante que estaba casi vacío. Fragmentos de vidrio roto se esparcieron por el suelo. Al recogerlo, vio que era una foto de él junto a Xia Ying. Una foto que Xia Ying le rogó que tomara. Tenía una mirada fría y molesta en la foto, pero pudo ver que Xia Ying lo miraba cariñosamente, como si fuera la única persona que amara en el mundo, su sonrisa era cariñosa, como si ni siquiera le importara que Lu Ziyun estuviera enojado.

Al ver la foto, Lu Ziyun recordó aquel momento. Se suponía que era el cumpleaños de Xia Ying, pero al mismo tiempo también era el cumpleaños de Xia Yang.

Xia Ying le rogó que se tomara una foto con él antes de irse a pasar el cumpleaños de Xia Yang. Incluso había olvidado el hecho de que ese día también era su cumpleaños. El no le impidió salir para irse con Xia Yang. Su único deseo fue el de tomarse una foto con él como regalo de cumpleaños. Lu Ziyun aceptó con enojo y le permitió tomar una foto. Recordó que se fue inmediatamente después de haberla tomado. Ni siquiera recordaba con exactitud aquel momento, pero sabía que esa foto lo hizo feliz. Esa vez estuvo tan preocupado por sorprender a Xia Yang que dejó a Xia Ying sin pensárselo dos veces.

Ahora que lo recordaba, nunca había pasado con Xia Ying sus cumpleaños, ya que era gemelo de Xia Yang, su claro de luna, siempre los paso con él, el gemelo Sol. Olvidándose por completo del gemelo Luna, que se había quedado a su lado, porque la persona que más amaba no era él.

Mirando hacia atrás, Lu Ziyun sintió dolor en su corazón a causa del arrepentimiento y la culpa. Solo de pensar que Xia Ying, cuya vida solía girar sobre él, desapareció repentinamente. Solo de esa forma supo qué fue lo que había perdido.

Los seres humanos tienden a pasar por alto las cosas que están más cerca de ellos, que las que están lejos de ellos. Solo se darán cuenta de su importancia una vez que haya desaparecido por completo.

Lu Ziyun se acercó la foto al pecho y la abrazó mientras intentaba controlar sus lágrimas.

—Ying-er, lo siento. —Sollozó en silencio a pesar de que nadie más que él podía oírlo. Por primera vez en su vida, el Emperador del Cine sintió lo que era estar solo.

Por otro lado, Xia Ying consiguió que su Sistema, el 13° Verdugo, le preparara un nuevo lugar para vivir. Todas sus peticiones se cumplieron, incluyendo el hecho de que la seguridad de su casa era aún más fuerte que la utilizada por el gobierno de aquel mundo.

Él viviría solo, por lo que trajo consigo una sencilla pero avanzada tecnología para satisfacer sus necesidades. Quería tener una ama de llaves debido a que era una persona perezosa, pero no estaba dispuesto a dejar que extraños entrara en su casa, por lo que le pidió a su Sistema que le permitiera traer tecnología de un mundo futurista.

Un ama de llaves automatizada. Por supuesto, todos los materiales fueron comprados por su Sistema. No quiere que otros se sorprendan por la clase de tecnología que tiene y necesitaba una forma legítima de usar el dinero en su billetera. Es por eso que le ordenó a su Sistema que comprara una empresa que se encontrara en quiebra, la utilizó como una cubierta de donde su dinero casi infinito provenía.

Xia Ying estaba viendo la escena dentro del condominio de Lu Ziyun a través del acceso especial del Sistema. Todo estaba bajo su control. Incluso le pidió a su Sistema que dejara caer ese marco para que el protagonista se diera cuenta de qué tipo de persona era el Xia Ying original.

Xia Ying era un hombre ciego. Se cegó solo para filtrar lo que su vista podía percibir. Solo veía los momentos en los que Lu Ziyun le daba su amor a pesar de ser un sustituto. Hizo la vista gorda por todo lo demás. Amaba a Lu Ziyun como un loco, pero a pesar de eso, no estaba dispuesto a dañar su corazón.

Dejó que Lu Ziyun lo usara a cambio de su tiempo y falso afecto. Así de desesperado estaba Xia Ying por alguien que lo amara. Xia Ying era un tímido hombre enamorado. Lo amaba pero no se atrevía a mostrar su amor abiertamente.

Él solo le regaló su amor en secreto, pero al final, incluso si trataba de ver solo el lado bueno del amor, a pesar de ser más claro el lado malo antes sus ojos. Cayó en depresión y la ansiedad golpeaba su corazón a cada segundo. Cuando Lu Ziyun rompió repentinamente con él, aquello se convirtió en la gota que derramó el vaso. Murió mientras dormía y Hei Anjing pudo hacerse cargo de su cuerpo.

Hie Anjing miraba al monitor solo para ver la culpa que sentía la basura de protagonista. Los ojos de Xia Ying permanecieron indiferentes y desapegados. Solo la sonrisa plasmada en la esquina de sus labios podría mostrar sus emociones, si aquella suposición era cierta o falsa, nadie podría saberlo.

—De verdad es una escoria.

Traducido por: Valiz

Traducido por: Valiz