Incluso el Villano Tiene Una Historia Novela capítulo 33

—Lo hiciste bien sin nada que mejorar.

—¿...por qué de repente actúa así?

—¿Qué?

—¿Por qué de repente me toca y me mira fijamente? Me hace sentir incómodo.

Fue un comentario divertido que provino de nadie menos que Geon-joo. Cada vez que intentaba ponerlo nervioso con un tono extrañamente amistoso, se ponía en guardia y armaba un escándalo. Qué tipo tan selectivo y felino.

No, esto se parecía más a un zorro.

Pero, ¿Qué importaba de todos modos? Si tenía la habilidad, eso era todo lo que contaba. Sa-yoon, atrapado en una mentalidad de supremacía de habilidad, simplemente sonrió con picardía.

—¿Necesito una razón para tratarte bien?

—No hable de manera tan romántica. No es el momento adecuado para eso.

—Sí, sí.

No le importaba si hacía una expresión tibia y se sentía agobiado, o si lo miraba con ojos extraños como si estuviera loco.

La mente de Sa-yoon estaba concentrada únicamente en sacar rápidamente a ese bombón de la puerta y llevarlo a la siguiente.

—Ya que has matado a tres, descansa un poco. Iré a acabar con la mitad y volveré.

—¿Qué?

—Después de descansar, movámonos de inmediato y despejemos rápidamente. Viendo tu velocidad, si te adaptas un poco más, podríamos despejarlo en veinte horas.

—¿Eh?

—Intenta subir ahí y descansar. Si te involucras, podrías morir innecesariamente.

Sa-yoon, sonriendo mientras hablaba brutalmente, señaló el árbol en el que había estado sentado antes. Geon-joo parpadeó distraídamente, incapaz de seguir el flujo de la conversación. Al considerar que era una pérdida de tiempo que dudara, Sa-yoon lo levantó abruptamente.

—¡Ah!

—No te caigas.

—¿En serio está loco?

—Oye, ve y siéntate ahí.

—¿Está realmente loco…?

Susurró palabras similares a las que había oído por la mañana. Sa-yoon, tomándolo como un cumplido, le dio las gracias y saltó al árbol, dejándolo en el suelo. En comparación con la vez anterior en que lo había arrojado imprudentemente, fue un trato excepcionalmente cortés y gentil.

—Llámame si se vuelve peligroso.

—…sabe que realmente no lo entiendo, ¿Verdad?

—¿Quién, yo?

—Sí.

—Eso está bien. Yo tampoco te entiendo.

—Sabe que no es eso lo que quise decir, ¿Verdad?

—¿Cómo que no lo es? Aprovecha esta oportunidad para pensar seriamente en quedarte conmigo. Entonces te conoceré y tú me conocerás. ¿No es eso matar dos pájaros de un tiro?

Además de eso, si te hago de grado S, activoEl Resistentee incluso te convierto en un ejecutivo del Gremio de las Night Rats, estoy matando cuatro pájaros de un tiro.

Sa-yoon se tragó la última parte de sus palabras, donde sus deseos quedaron expuestos descaradamente. No importaba lo emocionado que estuviera, sabía que si decía eso ahora, Geon-joo se volvería cauteloso.

Mientras Sa-yoon lo miraba, llenando cada palabra con sinceridad, Geon-joo movió los labios y luego se tocó la frente. Suspiró y agitó la mano. Era una señal para que fuera y terminara lo que tenía que hacer primero. Sa-yoon, satisfecho con eso, saltó del árbol.

Luego, desató la energía helada que había estado reprimiendo sin limitación.

Chwak.

La energía helada se extendió rápidamente desde los pies de Sa-yoon hasta cada rincón de la puerta. La propagación fue intensa. Cuando el suelo se congeló y quedó cubierto de nieve blanca, los ojos de Sa-yoon se volvieron azules.

¡Chwak!

Cien lanzas brotaron del suelo helado y alcanzaron varias plantas, flores y animales. En un instante, el hermoso jardín se transformó en un jardín de lamentos lleno de gritos.

—¡Kieeeek!

—¡Kiaaaa!

—¡Kraaaa!

Los gritos de Falsirocus se oían de aquí para allá. Había esperado que la mitad de los cien fueran alcanzados, pero parecía que un número bastante grande estaba en lo cierto, ya que las criaturas que aparecieron parecían ser unas sesenta.

—Esto podría ser demasiado.

También tuvo que dejar algunos para que Geon-joo los matara, pero tal vez haya llamado demasiados. Reconociendo el exceso, Sa-yoon decidió tenerlo en cuenta para el siguiente ataque y chasqueó los dedos.

¡Kuee!

—Kiiii….

Las lanzas que brotaron del suelo atravesaron los corazones de los sesenta Falsirocus. Esta vez, no hubo necesidad de mostrarles cómo luchar, por lo que fue eficiente terminar con ello rápidamente.

Pat, pat, pat.

El suelo tembló cuando Falsirocus cayeron en varios lugares. No habría sido de extrañar que se produjera un terremoto, dada la cantidad de personas que habían caído simultáneamente.

Si el suelo temblaba tanto, había criaturas que reaccionaban.

Sintiendo una enorme vibración desde las profundidades del suelo, Sa-yoon calculó que al menos treinta gusanos estaban entrando y eso intensificó aún más la energía helada.

Crack, crack.

El mundo entero se congeló. A excepción de dos lugares, donde estaban Sa-yoon y Geon-joo, todo lo demás se congeló sin piedad. Finalmente, la nieve comenzó a caer del cielo. Mientras el mundo se volvía completamente blanco, gusanos gigantes brotaron del suelo.

—¡Graaaaa!

Su impulso era bueno, pero sus vidas no durarían mucho.

Crack, crack.

Tan pronto como salieron del suelo, todos los cuerpos de los Crazyworms se congelaron.

Uno, dos, tres, cuatro.

Las criaturas que aparecieron una tras otra se congelaron y solidificaron en el aire como animales antiguos exhibidos en un museo.

¿Eran un poco más de cuarenta?

En ese ataque se pudo completar aproximadamente la mitad del cupo. Sa-yoon golpeó el suelo helado con su zapato. Todo lo que estaba congelado se hizo añicos y explotó.

Junto con el sonido de objetos afilados rompiéndose, los cadáveres de los monstruos se dispersaron en todas direcciones.

Ding-ding-ding-ding.

El número de monstruos muertos en condiciones despejadas aumentó rápidamente. Debido a que la temperatura bajó a menos veinte grados Celsius, los monstruos voladores que habían estado volando en el cielo también comenzaron a caer.

•• ━━━━━ ••●•• ━━━━━ ••

[Conteo de muertes de monstruos voladores: 102/300]

[Recuento de muertes de gusanos: 57/100]

[Recuento de muertes de Falsirocus: 65/100]

•• ━━━━━ ••●•• ━━━━━ ••

En comparación con antes, los números habían aumentado significativamente. Fue un récord que Sa-yoon había establecido en menos de tres minutos. Después de esperar a que cayeran algunas criaturas voladoras más, Sa-yoon completó el recuento de doscientos monstruos voladores asesinados y finalmente retiró la energía helada.

El lugar que había experimentado brevemente un frío similar al de la primera puerta inexplorada de grado S, “Rastros congelados de antigüedad y llamas ardientes”, recuperó lentamente su calidez original.

Como si el tiempo hubiera retrocedido, las flores volvieron a florecer en el suelo, monstruos voladores se elevaron en el cielo, la nieve dejó de caer y salió el sol.

Geon-joo, incapaz de creer la visión mágica incluso después de verla con sus propios ojos, miró a Sa-yoon parado en el centro del lugar donde los restos de la energía helada, aún no completamente retirados, brillaban como escombros de hielo, como si estuvieran fascinados por algo.

Sa-yoon, que había acabado con los monstruos con destreza, tenía una expresión satisfecha. Ahora se sentía un poco más renovado.

—…

—¿Por qué tienes esa expresión tan vacía?

Sa-yoon, que había regresado al lado de Geon-joo sintiendo placer, preguntó desconcertado al ver su expresión. La persona que lo había mirado como si le preguntara si no lo sabía pronto inhaló.

—…es más fuerte de lo que pensaba.

—¿Más fuerte de lo que pensabas? Esta es solo una puerta de grado C. Si no puedes hacer tanto, no puedes ser considerado de grado S en ningún lado.

Era un espacio que podía terminar y dejar en cinco minutos si quería. Sin embargo, como Geon-joo estaba con él y tenía que seguir su ritmo, Sa-yoon había establecido el tiempo de permanencia en veinte horas. Cuando le dirigió una mirada absurda, Geon-joo agarró su espada.

—…solo un simple…

—¿...?

—-…si te conviertes en un grado S, ¿Todos se volverán tan fuertes como el líder del gremio?

—Se volverán similares. Después de todo, la calificación es la misma.

El grado era el mismo, pero el nivel era diferente. Mientras se tragaba esas palabras, Geon-joo, al ver que aún quedaban los cadáveres de los monstruos, abrió los ojos de golpe y bajó del árbol.

—¿Nos vamos ahora mismo, líder del gremio?

—De repente te estás volviendo amigable, ¿Eh?

—Simplemente pensé que intentaría tener cierta reverencia.

El chico que hacía un momento se había mostrado desconfiado, cauteloso e incómodo, preguntándole por qué lo trataba tan bien, ahora sonreía y lo llamaba.

Sa-yoon podía estar seguro de que quien realmente no podía entender era Geon-joo.

Cada vez lo llamaba loco, pero a los ojos de Sa-yoon, él era un loco potencial que lo sucedería.

—¿Tiene como seis personalidades o algo así?

—¿Perdón?

—Hablando conmigo mismo.

Sa-yoon, que había dado una respuesta sencilla, escaneó el interior de la puerta y retrocedió un par de pasos.

—Puedes pensar en completar el cupo restante tú solo.

—Sí.

—Me quedaré atrás tanto como sea posible ya que esta puerta es para que ganes experiencia, así que llámame si se vuelve peligroso o difícil.

—Sí.

—Avísame si necesitas algo también.

—Sí.

¡Qué satisfactorio!

Quizás porque le había mostrado la diferencia de poder, Sa-yoon, complacido con las dóciles respuestas de Geon-joo, asintió y empujó su espalda, diciéndole que lo intentara por su cuenta.

La persona que respiró profundamente inmediatamente comenzó a buscar a Falsirocus y comenzó el combate.

—Parece que veremos la noche.

Sa-yoon, calculando el tiempo aproximado para despejar el cielo mientras observaba el cupo restante y la velocidad de Geon-joo, observó el cielo aún despejado. Aun así, parecía que podrían despejar el cielo y partir en doce horas.

Eso es lo que pensaba, pero.

—Se acabó.

—¿...qué debería hacer realmente?

—¿Qué?

Ese loco cabrón de Geon-joo acabó con todo en cinco horas. Al principio, le costó un poco acabar con ellos uno por uno, pero después de unas cuantas rondas, incluso convocó a cuatro o cinco criaturas y luchó contra todas a la vez.

Sa-yoon se cubrió la boca al ver a la persona que había atravesado la puerta rápidamente.

Era indescriptiblemente admirable.

Como era de esperar, tenía que mantenerlo a su lado de por vida, convertirlo en ejecutivo del Gremio de Night Rats y hacerlo trabajar como un esclavo. Si estuviera en ese nivel, incluso si el sistema le dijera que activaraEl Resistentey los matara, dudaría un poco.

Sa-yoon, conmovido hasta las lágrimas por el creciente deseo de talento, le dio una palmadita en el hombro a Geon-joo, quien lo miraba con ojos que decían que lo estaba haciendo de nuevo.

—Buen trabajo.

—…usted también, Líder del Gremio.

Respondió un poco incómodo y tibio. Sa-yoon, que le había alborotado el cabello, terminó de elogiarlo y se preparó para regresar. Fue entonces cuando sintió una señal extraña.

Rum, rum, rum.

El suelo se estremeció. Se estremeció con un sonido incomparable a las vibraciones mediocres que se habían experimentado hasta el momento, un sonido que requería literalmente que un edificio de cien pisos saltara de un lado a otro para producirlo.

Ante ese sonido siniestro, Sa-yoon giró la cabeza.

—¿Qué es eso?

Geon-joo, que había girado su cuerpo junto con él, se quedó en silencio por un momento y preguntó en voz baja. Sa-yoon, que había confirmado la existencia que llenaba su visión, pronto distorsionó su rostro.

—Mierda….

¿Por qué aparece esto aquí?

Porque su lindo niño había hecho algo lindo, él se había olvidado por completo de ello.

El hecho de que su vida era jodidamente miserable.

—Corre.

—¿Perdón?

—¡Dije que corras hasta que se cierre la puerta!

Tuvieron que huir de eso.

Sa-yoon agarró el brazo de Geon-joo, lo puso frente a él y gritó con urgencia mientras empujaba su espalda.

Traducido por: Valiz

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