Incluso el Villano Tiene Una Historia Novela capítulo 32

—¿Sonriente…?

Sa-yoon sintió que su mente se quedaba en blanco al ver a Geon-joo sonriendo tranquilamente en una situación en la que su cuello podría volar en cualquier momento. Y entonces, Geon-joo agarró firmemente la espada con ambas manos y saltó.

La espada incrustada en el Falsirocus aún no había sido sacada.

¡Chwaaaaak-!

—¡Kieeeek!

La espada, con un rendimiento cercano a un grado S, atravesó la piel del Falsirocus en línea recta mientras descendía.

A medida que se acercaba al suelo, la fricción redujo la velocidad. Gracias a eso, Geon-joo aterrizó con firmeza y sacó la espada profundamente incrustada.

¡Chwak!

La sangre de la espada salpicó por todas partes. Al mismo tiempo, la sangre brotó a borbotones de la piel desgarrada del Falsirocus.

Geon-joo, que no quería ser golpeado por la sangre que brotaba como una fuente, dio un paso atrás. Mientras el Falsirocus gemía y comenzaba a buscarlo con los ojos inyectados en sangre, Geon-joo lo esquivó, se agarró a un árbol y trepó. Como si hubiera sido un mono en su vida anterior, su habilidad para apuñalar el árbol con su espada y trepar era excepcional.

Geon-joo, que había subido a un lugar con una vegetación densa, chasqueó la lengua a la altura de los ojos, que aún no coincidían, y pateó el árbol. Cuando el Falsirocus se dio la vuelta, le clavó la espada en la espalda.

La espada que había desgarrado el frente ahora desgarraba la espalda. Usando el mismo método que antes, Geon-joo rasgó la piel de la criatura y aterrizó. Mientras sacaba su cuerpo, la criatura, temblando y soportando el dolor, finalmente se inclinó hacia adelante.

¡Kwaaaaang!

El enorme cuerpo se desplomó con un sonido pesado.

Sa-yoon, que había observado toda la situación de cerca y directamente, no pudo decir una palabra.

—...

Olvidando que había bajado a ayudar, se quedó mirando al hombre que se limpiaba la sangre de la cara, inusualmente estupefacto.

Geon-joo, después de limpiarse la sangre y el sudor, respiró hondo e inmediatamente cortó otra planta sin parar. Sa-yoon no tuvo oportunidad de detenerlo.

—¡Kiaaaa!

Esta vez, logró golpear a los monstruos consecutivamente. La planta cortada por la espada de Geon-joo gritó y se lamentó. Aumentó de tamaño. Esta también era de primer grado.

Geon-joo, sin cometer el acto encubierto de atacar durante la transformación como antes, cargó contra la criatura rugiente.

¡Chwak! ¡Chwak! ¡Chwak!

Como si hubiera captado el patrón después de verlo una vez, las enredaderas que se hundían no lograron golpear a Geon-joo y en su lugar golpearon el suelo. Esquivando suavemente todos los ataques como si hubiera predicho la trayectoria de antemano, Geon-joo fue directo a los pies del Falsirocus.

¡Zas!

Echó hacia atrás con fuerza el hombro y levantó la espada.

¡Qué bien!

Con un sonido brutal que hizo difícil creer que era una puñalada con una daga, la espada atravesó la parte superior del pie del Falsirocus de primer grado.

—¡Kieeeek!

Se escuchó un grito ensordecedor. Sin inmutarse, Geon-joo agarró con fuerza la espada clavada en la parte superior del pie, apretó los dientes y saltó, dibujando una línea roja hasta el talón del Falsirocus. Fue un ataque que reveló una determinación tenaz de apuntar con precisión a la siguiente parte más vulnerable si los ojos no eran una opción.

Geon-joo, sin importarle la sangre que salpicaba su ropa, se dio la vuelta y apuñaló con fuerza el tendón de Aquiles un par de veces como si golpeara un árbol, luego se retiró apresuradamente.

¡Silbido!

La mano de Falsirocus, intentando tardíamente agarrar a Geon-joo, rozó levemente su cabello negro. Ya sea que no tuviera miedo o no, Geon-joo continuó moviéndose rápida y audazmente como si tuviera nueve vidas.

La mejor defensa es el ataque, y el Geon-joo frente a sus ojos estaba demostrando el verdadero valor de esas palabras.

Geon-joo, que había estado presionando caóticamente a la criatura atacando alternativamente con ambos pies, aprovechó una abertura y trepó por el cuerpo del Falsirocus, blandiendo su espada. A mitad de camino, el de primer grado intentó atacar levantando la mano, pero Geon-joo lo esquivó saltando como una ágil ardilla voladora. Luego, atacó al segundo de primer grado de la misma manera que antes.

El primer grado, que cayó más rápido que el primero, añadió vibraciones al espacio. En reacción a esas vibraciones, un gusano surgió abruptamente del suelo.

Geon-joo, que había estado jadeando sin poder descansar un solo momento, vio al enemigo y saltó del suelo. Luego, tal como lo había hecho Sa-yoon, clavó su espada en la boca de la criatura y estranguló firmemente el cuello del gusano con una enredadera que había estado adherida al cadáver del Falsirocus, que había obtenido en algún momento.

Kku-Uk.

La dura enredadera se clavó en la tierna piel de la criatura. Sin embargo, el gusano no era un oponente que pudiera soportarlo tranquilamente.

—¡Grrraaah!

La criatura que gemía se sacudió y retorció su cuerpo como un loco. Se enroscó como un pan retorcido, luego se sacudió hacia arriba y hacia abajo, cayendo al suelo con un ¡Bang! ¡Bang! Geon-joo, que casi había sido arrojado al suelo una vez, desafortunadamente fue aplastado bajo el cuerpo del gusano y tosió sangre.

Eso parecía peligroso.

Podría asfixiarse de esa manera. Aunque el gusano inmediatamente levantó su cuerpo y se dio vuelta hacia el otro lado, considerando su tamaño, no sería de extrañar que se rompiera una costilla o dos.

Pensando que eso era suficiente, Sa-yoon estaba a punto de ayudar a su lindo niño cuando Geon-joo, que había estado tosiendo sangre, agarró desesperadamente ambos extremos de la liana y la apretó. Manteniendo la confrontación, Geon-joo apretó los dientes. El gusano se retorció y los brazos de Geon-joo también temblaban.

—Grrrr….

Después de una batalla de resistencia que duró poco más de cinco minutos, el que se derrumbó fue el Crazyworm. ¡Ruido sordo! El cadáver del gigantesco Crazyworm fue colocado al lado del cadáver del Falsirocus de primer grado.

—...

El silencio descendió sobre la puerta donde las vibraciones habían disminuido. Sa-yoon miró alternativamente los cadáveres de los tres monstruos asesinados en un instante y a Geon-joo, que tosía mientras sacaba la espada del gusano.

Después de vomitar sangre unas cuantas veces más y secarse el sudor que le caía, se echó hacia atrás el cabello mojado y se volvió hacia Sa-yoon. Aunque su rostro estaba tenso, no había señales de agotamiento. La mente de Sa-yoon dio vueltas al ver su rostro limpio, sin mostrar signos de fatiga incluso después de matar a tres criaturas en un instante.

Grado B.

Un novato que acababa de graduarse de ser un principiante.

Monstruos de grado C a los que se enfrentaba por primera vez.

Sa-yoon, recordando cada uno de esos hechos uno por uno, miró a Geon-joo a los ojos y tragó saliva.

No tenía muchas expectativas, pero Geon-joo había matado a tres monstruos en un instante. Todo él solo, sin ningún apoyo.

Había demostrado un juicio y un sentido comunes sin que nadie le hubiera enseñado. En especial, la aplicación de las enredaderas de Falsirocus para estrangular al gusano hasta matarlo fue tan brillante que quiso grabar un video y mostrárselo a los demás miembros del gremio.

Sa-yoon, que había estado mirando a Geon-joo como si fuera una criatura desconocida, tembló brevemente al notar que su corazón latía más rápido de lo normal. Latía tan rápido y tan fuerte que otros incluso podrían oír su pulso. Apretando los labios, Sa-yoon no pudo evitar sonreír.

No podía negarlo.

Su tendencia a actuar como si fuera el único en el mundo no era sólo una fanfarronería vacía.

Fue una suerte que tuviera la habilidadOjo de Genio.

Si no la hubiera tenido y no hubiera descubierto a su lindo niño, permitiendo que otro gremio se lo arrebatara, podría haberse vuelto loco al recuperar el sentido común y haber iniciado una guerra de gremios.

Incluso si murieran cien miembros de su gremio, él habría intentado sacar a Geon-joo. Habría usado cualquier medio necesario, incluso si fuera deshonesto y desagradable, para arrebatárselo.

Ése era su talento. Un talento que, si no lo conseguía, derramaría lágrimas de sangre.

No solo lo llamaba niño bonito, sino que realmente era un niño bonito. Un manojo de suerte que había llegado rodando, con raíces y todo.

Hasta ahora, cuando miraba a Geon-joo, sus pensamientos se limitaban a que era lindo y apuesto, y que sería útil para estafar. Pero ahora, realmente se veía lindo para él. No solo su apariencia, sino su rostro, acciones e incluso sus palabras insolentes se veían lindas.

¿Y qué si era un poco descarado?

En un principio, la gente con talento valía la pena. ¿No era lo mismo para él?

Si Jongsik lo hubiera oído, se habría desmayado, pero Sa-yoon tenía confianza. El principio de Sa-yoon era que si tenías la habilidad, podías ser digno de tu merecido. Y desde esa perspectiva, Geon-joo era muy valioso.

Si se lo educaba adecuadamente, podría llegar a ser un líder de gremio. Podía ver su potencial.

—Lo hiciste bien.

Sa-yoon, liberado de las emociones de admiración y alegría, se aclaró la garganta un par de veces y se acercó a Geon-joo, hablándole. Tal vez por la habilidad que acababa de presenciar, cuando lo llamó con un tono particularmente suave, Geon-joo notó de inmediato la anomalía y se distanció de él.

—¿Qué pasa de nuevo?

—¿Qué quieres decir? Es un cumplido.

—…

—¿Dónde aprendiste a tratarlos así? Si alguien te pregunta, dile que lo aprendiste de mí, niño bonito.

—El líder del gremio aún no me ha enseñado nada, ¿Verdad?

—Te enseñaré todo a partir de ahora, así que di que lo aprendiste de mí.

Cuando sonrió brillantemente pero abrió mucho los ojos, lanzando un comentario amenazador, asintió con la cabeza con un suspiro y dijo:

—Ah, sí. —Su intención de dar una respuesta dura y olvidarse de ello era claramente visible, pero no estaba molesto.

—Sí, deberías valer la pena si tienes talento.

Le pareció admirable.

Desde la perspectiva de Sa-yoon, era mejor si Geon-joo fuera un poco descarado. Otros gremios podrían no codiciarlo si su personalidad fuera desagradable y deshonesta, ¿Verdad?

Considerando ese aspecto, incluso una personalidad insoportable parecía bien.

Sin darse cuenta de que Sa-yoon albergaba esos pensamientos, Geon-joo preguntó si había algún consejo con respecto a la batalla anterior.

Se trató de una solicitud para señalar áreas de mejora, pero no había nada más que decir.

Geon-joo lo había hecho bien.

Había realizado los mejores ataques que pudo en esa situación, por lo que Sa-yoon simplemente le dio una palmadita en la cabeza a Geon-joo. Era como si la miel goteara del cuerpo de su lindo niño.

Traducido por: Valiz

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