Funcionario Público En Fantasía Romántica Novela capítulo 31

Ser secuestrado por Marghetta porque era el fiscal era agotador. Pero lamentablemente también soy el  asesor del Club de Pastelería.

Por la mañana tuve que consultar el saldo del Consejo Estudiantil; por la tarde me tocaba ver lo que planeaba hacer el Club de Pastelería en la Exposición.

"Un empleo concurrente es inhumano."

Había evitado realizar trabajos simultáneos incluso en el Ministerio de Finanzas del Imperio, donde se explotaba a los trabajadores. Nunca hubiera imaginado que haría esto en la Academia. Espero que la Exposición termine lo antes posible.

Aunque mi cuerpo estaba bien, mi mente estaba cansada. Mientras estaba sentado, pude ver a los miembros del club hablando entre ellos. Todos ustedes están rebosantes de energía; Sería fantástico si existiera Magia que te permitiera prestar tu energía a los demás. ¿Fue porque trabajé demasiado en mi adolescencia? Sentí que mis niveles de energía habían disminuido a pesar de que solo tenía veintitantos años.

Esos seis estaban ocupados preparándose para la Exposición sin importar lo cansado que yo estuviera.

-"Creo que sería mejor tener una variedad más amplia. Siento que sólo las galletas no son suficientes. Algo falta, algo está faltando."

Aunque Tannian lo había dicho en voz baja, estaba claro lo que estaba pensando. Si solo ofrecieran galletas, la gente terminaría tomando las de Louise. Entonces también deberían hacer otras cosas.

-"También puedo hacer pasteles o pan".

-"Louise, concéntrate en las galletas. Déjanos el resto a nosotros".

Rutis detuvo rápidamente a Louise. En lugar de eso, aprenderían a hacer cosas en lugar de dejarlas en manos de Louise. Esos bastardos planeaban usar las galletas de Louise como carta de lanzamiento.

-"No piensan en sus papilas gustativas".

No consideraban que sus papilas gustativas fueran demasiado refinadas. Pero considerando que la mayoría de los visitantes serían nobles, era una elección razonable.

Al principio pensé que eran muy exigentes con la comida porque eran príncipes. Pero eso no explicaba por qué ni siquiera Erich podía comer las galletas de Louise. ¿Era el paladar promedio de un noble tan lujoso? No estoy seguro ya que no soy un noble promedio.

De todos modos, los otros miembros del club asintieron ante la idea de Rutis. Después de todo, parecía mejor que todos hicieran su parte que dejarle todo a Louise. Aunque el verdadero motivo era completamente diferente.

Así era la hora del horneado, donde se podía oler el olor a harina. Hay tanta harina que siento que se me va a entrar por la nariz. Tomar harina por la nariz parece extraño, así que no envíes la harina volando de esta manera.

Fue reconfortante ver otras cosas además de las galletas. ¿Eran realmente los chicos del club de pastelería que no sabían hornear nada hasta hace poco? No pude evitar sorprenderme. Sería fantástico si su sentido común también aumentara a este nivel.

-"Es mejor de lo esperado y perfectamente podríamos venderlo durante la Exposición.”

Esa fue la reacción de Erich después de comer un trozo de pan; parecía adaptarse a su paladar. Tal vez estaba siendo generoso porque fue él quien lo hizo, pero en realidad no importaba. Eran bocadillos elaborados y vendidos por personas influyentes, por lo que nadie era lo suficientemente valiente como para quejarse del sabor.

En ese sentido, no sería un problema aunque solo vendieran las galletas de Louise. Después de todo, nadie podría decir quién fue el que los hizo. Pensar en eso me hace sentir que han luchado inútilmente.

Comí un poco del pastel, que era ligeramente diferente al que hizo Louise. Dejemos sentido al hecho de que han elaborado un menú variado.

-“ Hermano, ¿cómo está?"

Louise me miró probando los nuevos artículos. Necesitaban mi aprobación; después de todo, yo era el asesor y asentí. Bueno, no estaban mal.

-"Está bien. No creo que haya ningún problema en que los vendas".

-"¿Pero no has probado sólo el pastel? Por favor, prueba las otras cosas también".

Después de decir eso, Rutis puso un trozo de pan delante de mí.

- No, gracias.

Si ustedes lo venden, la gente seguirá comprándolos incluso si vendieran harina y mantequilla.

-'Puaj...'

-"Hay demasiados..."

No lo noté a primera vista. Pero pensar que necesitaba probarlo todo me hizo darme cuenta de que había demasiada comida. Chicos, el asesor no era un conejillo de indias que comía pan.

-"Es difícil hacer un juicio honesto ya que fuimos nosotros quienes lo hicimos. Por eso creemos que deberías ser tú quien nos diga cómo es".

-"ya veo."

No se me ocurría cómo refutar las palabras de Lather. ¿Pero no fue demasiado para mí comer toda la comida que habían preparado los seis?

Después de sentir los ojos de los seis, mis manos se movieron silenciosamente. Una vez más, parecía que no necesitaría cenar.

-"Ahora que lo pienso. ¿No es suficiente una vez?”

Mientras comía,  Rutis comenzó a hablar de nuevo.

“Bastardo, ¿qué vas a decir ahora?”

-"Las galletas son una cosa. Pero es la primera vez que hacemos estas otras cosas. Aunque pueden estar bien ahora, no hay garantía de que estén bien durante la Exposición".

-"Tienes razón."

-"Es por eso que deberíamos seguir haciéndolos. Estoy seguro de que sabrán mejor una vez que nuestras manos se acostumbren".

Rutis y Lather me miraron. Ainter, que estaba detrás de mí, dijo mientras se reía.

-"Parece que el asesor va a tener dificultades".

Y entonces, los socios del club empezaron a hacer pan como si fueran máquinas.

-"¿Qué tal esto?"

-"Está bien."

-"¿Qué pasa con esto?"

-"Nada mal."

-"¿Esto también es bueno?"

-"Sí."

Aunque seis personas ofrecían, sólo una era exigente. El Duque de Oro habría gritado si hubiera visto lo que estaba pasando. Tal cantidad de comida era suficiente para matar a una persona.

Los miembros del club comenzaron a susurrar entre ellos mientras me miraban comiendo.

-"Él dice que todo está bien. Así que no estoy seguro de que ese sea el caso".

-"Ahora que lo pienso, mi hermano siempre ha comido de todo".

-"Hmm, hemos elegido a la persona equivocada para probar".

-"Hijos de puta."

Miré enojado a los miembros del club. Lamentablemente, no eran personas a las que pudiera abrumar con fuerza. Así que hice lo mejor que pude para calmarme; No, creo que al menos Erich debería estar bien.

Apenas alcancé a terminar el pan y golpeé la mesa. Dejemos aquí las tonterías.

“Estos bastardos.”

-"Esto fue suficiente. Dejémoslo aquí por hoy".

“ Si lo ha entendido, váyanse a la mierda.”

Agité mis manos y les dije que se fueran. Fue sólo entonces que los miembros del club comenzaron a irse junto a Louise.

-"¿Louise?"

-¿Lo que pasó?

Louise nunca había sido la última en salir de la habitación. Porque, después de todo, esos cinco siempre estuvieron dispuestos a esperarla. Vi a Louise decirle algo a los demás. ¿Les dijo que se fueran primero?

Con mis ojos cautelosos, Louise sacó una pequeña caja de su bolso. Cuando recibí eso, ella comenzó a jugar con su cabello mientras hacía una expresión tímida.

-" Hermano... Parecía cansado recientemente y escuché que este té es bueno para la fatiga. Así que lo he traído".

-"Vaya."

Me conmoví. Pensar que habría alguien tan considerado entre los miembros del club que no sabía cuánto estaba luchando.

-"Si los demás fueran la mitad de considerados que ella".

El solo hecho de estar aquí me cansaba; Además de eso, para empeorar las cosas, Marghetta también me estaba arrastrando. Pensé que lo estaba ocultando bien, pero parecía que Louise se dio cuenta. Como era de esperar, Louise era una niña perfecta que no había hecho nada malo. Los culpables fueron los otros cinco.

-"Gracias."

Cuando respondí con una sonrisa, Louise también sonrió.

-" Hermano ."

-"¿SI?"

Me levanté para poner el tarro de té junto a las galletas cuando escuché a Louise llamándome.

-"¡Si pasa algo, no dudes en decírmelo! ¡Si es por el hermano, te ayudaré con cualquier cosa!”

Luego hizo una reverencia y salió del salón evitar reírme del club. No pude evitar reírme de esas palabras.

'¿Me veía tan cansado?'

Pensar que escucharía eso de un niño que acababa de convertirse en adulto. Me sentía culpable.

“¿Era tan obvio? No hay forma.”

Me quedé mirando fijamente la puerta antes de desviar la mirada. Aunque era difícil de creer, era cierto que Louise descubrió mis pensamientos internos.

Pero además de eso, tenía que prepararme para el visitante que llegaría pronto. Después de todo, él era quien me iba a ayudar a deshacerme de una cantidad tan grande de bocadillos.

Mientras pensaba eso, escuché que alguien llamaba a la puerta.

-Toc Toc.

-"Sí."

Un hombre abrió la puerta e hizo una reverencia.

-"¿Le ha ido bien, fiscal?"

-"Por supuesto. ¿Qué hay de usted, señor Villar?

“Entonces estás aquí. Mi víctima diaria.”

Recibí a Villar con una cálida sonrisa.

Entre estos bocadillos hay cosas que hizo tu Príncipe, así que tú también debes comerlas.

-¿No es eso justo?

[Traductor: Ni yo se]