Funcionario Público En Fantasía Romántica Novela capítulo 26

Fue un día con muchas coincidencias. Louise siempre iba a la Academia con Irina, pero acabó contrayendo la gripe primaveral. Incluso Erich había ido a la Academia antes de lo habitual porque había sido convocado por el subdirector. A todos sus otros amigos también les pasaban cosas. Así que, a diferencia de lo habitual, Louise iba sola a la Academia.

Louise nunca había ido sola a la escuela antes, así que lo encontraba un poco incómodo, pero no era porque no quisiera caminar sola. Al caminar solo, el ritmo y la energía son diferentes a cuando caminas junto con otras personas.

Louise se tomaba su tiempo para caminar, disfrutar de la brisa de la mañana y disfrutar de las flores. Erich probablemente la estaría esperando cuando llegara a clase, y una vez que Irina regresara de la enfermería, le preguntaría si se encontraba bien. Así se suponía que debía ser su mañana.

Si no fuera por la voz que la llamó.

-"¿Lady Louise?"

Louise se dio vuelta ante la voz inesperada que nunca había escuchado antes. Tenía el pelo rojo rizado que le llegaba a la cintura y ojos verdes. Estaba tapándose la boca con un abanico rojo. Estaba mirando a Louise. Parecía ser el tipo de persona acostumbrada a estar por encima de la gente.

-"¿Eres Louise, la hija del barón Naird?"

Aunque era una pregunta externa, parecía saber la respuesta. La voz confiada de la estudiante se extendió por los alrededores.

-"Sí. Mi nombre es Louise Naird".

Aunque de repente empezó a hablar con ella, ignorarla sería de mala educación. Louise bajó la cabeza y se presentó. La otra estudiante aceptó la presentación y abrió la boca.

-"Soy Marghetta Velenti, la vicepresidenta del Consejo Estudiantil y tu mayor por un año".

Los ojos de Louise se abrieron ante esas palabras. Valenti, era la familia del Duque de Sangre de Hierro, uno de los cinco duques del Imperio. Marghetta era la hija menor del duque de sangre de hierro. Ella era una hija que él había engendrado a una edad avanzada. El duque tenía nietos mayores que ella, por eso la mimaba.

-"Lady Marghetta, encantado de conocerla".

A diferencia de un simple saludo, Louise se inclinó adecuadamente. En el Imperio, los duques tenían mucho poder. Aunque eran cinco, eso no significaba que tuvieran menos poder por eso. Marghetta sacudió la cabeza y dijo.

-"No hay necesidad de hacer eso. En la Academia todos somos iguales. Soy solo uno de los muchos mayores que tienes".

-‘"Sí bien. Señorita."

Nadie tomó en serio esas palabras. Después de todo, la vida después de los tres años de la Academia fue larga. Eso era algo que incluso Louise sabía, incluso si normalmente estaba rodeada de príncipes y un candidato a Santo. Quizás Marghetta daba más miedo que los miembros de su club.

El Tercer Príncipe no tenía autoridad real y los otros miembros del club regresarían a sus respectivos países después de la Academia, pero Marghetta tenía el poder de hacer temblar de miedo a la mayoría de los nobles.

Marghetta sonrió después de mirar la figura temblorosa de Louise. "Había algunas cosas de las que quería hablar contigo”. ¿Podrías darme algo de tiempo?

-"Sí, claro."

-"Gracias."

No había manera de que Louise hubiera podido rechazar la propuesta de Marghetta. Ella simplemente la siguió en silencio.

★★★★★★

Mientras seguía a Lady Marghetta, mi cuerpo temblaba mucho. Después de todo, daba miedo hablar con alguien importante con quien normalmente no interactuarías.

Lo había experimentado cuatro veces con Ainter, Rutis, Lather y Tannian. Pero aún así, no pude acostumbrarme. No. ¡Va a estar bien.!

Al principio, estaba muy nerviosa con ellos, pero ahora disfruto ser su amiga y pasar el rato en el club. Sí, probablemente todo estaría bien. Después de todo, no he hecho nada que la ofenda.

Lady Marghetta de repente se detuvo, se dio la vuelta y me dijo algo.

-"Lady Louise, necesita reflexionar sobre sus acciones".

-Ah, entonces había algo... Parece que he hecho algo que la molesta.

Bajé la cabeza ante los primeros ojos fríos que recibí de alguien. Aunque había bajado la cabeza, todavía podía sentir sus ojos fríos.

-"Este año sucedió algo sin precedentes en la     Academia. Tu sabes de qué estoy hablando. ¿Bien?"

-"Sí Sí..."

La explicación de Marghetta fue simple. Que VIP de otros países ingresaran a la Academia era algo que nunca había sucedido. En esta situación deberían tener mucho cuidado y tratar de mantener la distancia, pero que yo  no solo no lo había hecho, sino que además estaba en el mismo club que ellos.

Como noble de sangre azul del Imperio, uno tenía que mantener las apariencias, pero yo no lo había hecho.

Sentí que mis ojos se volvían borrosos. Tenía miedo de esta situación y la encontré injusta. ¿Estaba tan mal divertirse juntos en el club? ¿Estaba mal que vinieran a  la  Academia y hicieran amigos en lugar de estar solos?

Sólo quería ser amigo de aquellos que parecían solos mientras comíamos galletas juntos.

-"Lady Louise, ¿entiendes lo que dije?"

Parecía que Lady Marghetta había terminado de hablar. Ella llamó mi nombre. Mientras intentaba contener las lágrimas, levanté la cabeza. Aunque tenía miedo, no podía simplemente dar marcha atrás. Si admitiera que fue mi error, tendría que despedirme de los socios del club.

Estaba a punto de abrir la boca cuando vi a alguien familiar acercándose a nosotros por detrás de Lady Marghetta.

-‘¡Hermano Carl!'

Cuando vi al hermano Carl, me relajé y terminé sonriendo. Lady Marghetta frunció el ceño mientras me miraba y luego se dio la vuelta.

-"Oh, Sir Carl. Mucho tiempo sin verlo."

En ese momento, por primera vez, sentí que la expresión de Lady Marghetta se había derretido.

★★★★★★★

No estaba seguro, pero ella realmente terminó siendo Lady Marghetta. Había oído que ingresó a la Academia el año pasado pero no esperaba verla aquí.

-"Cuánto tiempo sin verla Lady Marghetta. ¿Cómo has estado?"

Incliné un poco la cabeza y le pregunté cómo le había ido, pero ella simplemente cerró el ventilador en silencio y me miró fijamente a los ojos.

-“¿Lady Marghetta?”

Pregunté de nuevo, pero solo hubo silencio. Se golpeó los labios con el abanico como si no estuviera satisfecha.

-Ah...

-"Mar, ¿cómo has estado?"

Mientras suspiré y pregunté, Marghetta finalmente sonrió y abrió la boca.

-"He estado bien, Sir Carl. Lo escuché de mi padre, pero es bueno verte en la Academia".

-"Nunca imaginé verte aquí. ¿Cómo está el duque?

-"Está en cama desde el año pasado. Parece que se sintió herido después de que su propuesta, que le había requerido mucho coraje, fuera rechazada de inmediato".

-"Pido disculpas por eso".

-"Fufu, ¿verdad? Estoy segura de que su estado de ánimo mejorará si le haces una visita".

-"En lugar de eso, rezaré por él".

Sacudí la cabeza en silencio. “¿Herir?“Si realmente visitara al Duque de sangre de hierro, probablemente me haría un suplex alemán. Aunque era el mayor entre los duques, tenía más fuerza que el joven promedio.

En silencio volví la cabeza hacia Louise. Parecía a punto de llorar en cualquier momento y sonreía torpemente.

“Maldita sea, parece que escuchó algunas palabras amargas.”

-"¿Qué te trae por Louise?"

-"Solo estaba dándole consejos como su superior".

Sentí que no era un simple consejo, pero decidí dejarlo pasar. Si insistía en el asunto, sólo conseguiría que la conversación se prolongara.

Como no intenté preguntar más, Marghetta volvió a taparse la boca.

”Ahora que lo pienso, siento que también vi a ese abanico el año pasado. ¿Siempre lo llevaba consigo?”

-"Entonces, me iré. Hasta la próxima vez que nos veamos".

Y luego, ella simplemente se fue.

Mientras miraba la espalda de Marghetta que se alejaba, sentí que Louise tiraba de mis mangas.

“Maldita sea, debería haber comprobado cómo estabas primero, pero no pude hacer eso.”

Cuando me di vuelta, vi a Louise mirándome con ojos llorosos. Sí, de repente te presionaron para hablar con la estimada hija del duque. Entonces tu reacción es comprensible. Aunque Louise ya estaba acostumbrada a andar con príncipes, no le sirvieron de nada para ayudarla a volverse más fuerte emocionalmente.

-"¿Estás bien? ¿Qué dijo ella?"

-"Fue sólo un consejo..."

-"Necesitas aprender a decir mentiras".

Louise miró nerviosamente a su alrededor, abrió y cerró la boca un par de veces y finalmente dijo la verdad.

Mmm.

-"Ella no se equivoca."

“Lo siento por Louise, pero Marghetta no estaba del todo equivocada.”

En realidad, fue un gran consejo. Si Louise no fuera la protagonista, habría pensado lo mismo.

Estaba en una posición extraña en la que no podía pararme a ningún lado, así que le di unas palmaditas en el hombro y le di un

pañuelo. Parecía muy triste mientras se secaba las lágrimas.

Mientras la miraba, comencé a pensar.

"Ella no parece ser la antagonista".

El primer pensamiento que cruzó por mi mente después de mirarlos a ambos fue si Marghetta era la antagonista. Por lo que había visto, en las novelas románticas de fantasía, suele haber un antagonista. Aunque no estaba segura porque no había leído demasiadas novelas románticas de fantasía.

Sin embargo, Marghetta no se adaptaba a las condiciones de un antagonista. No era como si fuera la prometida de uno de los cinco que se habían enamorado de Louise. Ella tampoco había hecho nada para dañarla o acosarla. Ella acababa de dar su verdadero y honesto consejo como la estimada hija de un Duque del Imperio.

Sí. Cinco organizaciones estaban tratando de destruir la Academia, por lo que no había forma de que hubiera una villana.

Después de relajarse, Louise me preguntó con cuidado.

-"Hermano, ¿conoces a Lady Marghetta?"

Louise añadió cuidadosamente que miramos de cerca. Negué con la cabeza. ¿Cerca? De ninguna manera. Aunque nos conocíamos, no diría que somos cercanos.

-"La conocí el año pasado porque pasó algo, pero no somos cercanos".

-"Pero... Ella parecía haber aceptado que la llamaras Mar".

-"Tampoco sé el motivo de eso".

La llamé así porque la hija del Duque había insistido. No había nada más estúpido que permitir que mi relación con la familia del Duque se arruinara por un apodo.

La razón por la que acepté ese apodo fue porque pensé que nunca tendría la oportunidad de decirlo. Después de rechazar la propuesta del Duque de Sangre de Hierro de casarme con Marghetta, no pensé que tendría la oportunidad de volver a encontrarla.

Pensé que eso sería todo, pero terminé encontrándome con ella aquí nuevamente. Como era de esperar, nunca se puede saber qué les depara el futuro.

[Traductor: Ni yo se]