El Maníaco Obsesivo Intenta Confinarme Novela capítulo 65

[Traductor: Pryse]

El Maníaco Obsesivo Intenta Confinarme

Capítulo 65

Bang.

La puerta de hierro se cerró frente a mí.

Las cosas se estropearon de nuevo.

Miré la puerta de hierro algo ida.

Se llevó a Richard al anexo donde se completó la construcción esta mañana. Sucedió tan de repente que me paré en blanco frente a la puerta de hierro.

No esperaba que lo hiciera ya.

Argen, bastardo loco.

Argen hizo una "sala de castigo" como si planeara dominar a Richard.

‘No me importó porque salió más tarde en la historia original…’

Tal vez debido a las frecuentes fugas de Richard, se presentó el caso.

Argen, que vino con sus caballeros temprano en la mañana, arrastró a Richard a la sala de castigos, donde lo castigó por su reciente alboroto.

“Para un bastardo loco, el castigo es medicina.”

“Incluso si te duele el cuerpo, si sigues moviéndote, puedes romper la mente.”

Como dijo Argen, la sala de castigo es una sala que hace que la gente sufra mentalmente.

Había un hechizo colgado en la habitación. Trae el trauma de una persona una y otra vez y lo empeora.

Sé que Richard es mentalmente fuerte, pero...

¿Puede soportarlo?

Lo soporta bien en la historia original, así que ¿no irá bien esta vez también?

Estoy preocupada.

Además, fui yo quien le dijo que fingiera estar loco, es mi culpa.

Las cosas ya me han salido mal dos veces ante mis ojos.

Y al pensar en ello...

‘Siento no poder ver a la criada pronto.’

Richard dijo eso.

¿Esperaba esta situación? Es como si supiera de antemano la existencia de la sala de castigos...

El espía de Richard trabajaba en el anexo, por lo que su espía podría haberse dado cuenta.

Pero Richard no tenía forma de saberlo a menos que el espía se lo dijera.

‘¿Cómo le dio la noticia a Richard?’

Tal vez Richard ya había adivinado que podría entrar en la sala de castigo.

...Lo sabe, pero tiene que actuar como si estuviera loco para engañar a Argen.

Miré la puerta de hierro.

Para ser precisos para Richard, que debe estar sufriendo más allá de la puerta de hierro.

Quería preguntarle si tenía razón. Pero este lugar estaba vigilado por porteros.

"Rosie, ¿no has oído la noticia de que no tienes que venir por un tiempo?"

Esta voz...

Suspiré y volví con el hombre.

"Ha pasado un tiempo, Eric-ssi.”

"¿Por qué no finges estar feliz de verme?"

"Me alegro de verte.”

Las cejas de Eric se retorcieron cuando respondí sin sinceridad.

"¿Por qué sigues aquí de pie? Debes haberte apegado bastante a ser la criada exclusiva del monstruo, ¿verdad?"

Parece que Eric tiene un mal presentimiento por mí debido a la última reunión.

"¿Pero qué hacer? Hay magia en esta habitación.”

Lo sé.

"Hasta que termine el 'castigo', la puerta nunca se podrá abrir con ninguna fuerza. Así que, Rosie, no puedes ver ese monstruo aunque quieras verlo.”

“Entonces, ¿por qué estás aquí Eric-ssi?"

"Es porque me asignaron aquí.”

No tengo tanta suerte.

Asentí la cabeza.

No solo me sentí cansada cuando hablé con él, sino que no tenía ganas de tratar con él.

"Entonces, Eric, ¿le entregarás la comida?"

"¿No lo acabas de escuchar? La puerta no se abrirá hasta que el castigo termine.”

"...Entonces, ¿cómo come?"

"Ya lo puse allí de antemano.”

—Oh, ¿es así?

No tengo que preocuparme de que Richard se muera de hambre.

"Supongo que estás preocupada por el monstruo, ¿eh?"

"Mi papel era ser una criada exclusiva, así que solo preguntaba por curiosidad. He terminado, así que me iré.”

Eché un vistazo rápido a Eric y a los guardias de pie allí.

...Como puedo ver, no se veían muy bien.

Cuando hablo con Eric, hay algunos que me dan una mirada extraña.

Por supuesto, las cosas no tan buenas sucedieron aquí mientras yo estaba fuera.

******

Fue cuando salí del anexo.

"Eres la criada Rosie, ¿verdad?"

Un sirviente se me acercó.

"¿Quién eres?"

"Soy un sirviente del primer Joven Maestro de Herthas".

Un sirviente de Dylan Herthas.

¿Por qué demonios viniste a mí?

‘...no me reconociste, así que supongo que no has estado sirviendo a Dylan durante mucho tiempo.’

¿Debería estar agradecido por este hecho?

"¿El primer joven maestro de Herthas tiene algo que ver conmigo?"

"El joven maestro al que sirvo quiere ver a la criada Rosie.”

“...Maldita sea.”

"Lo siento, pero no escuché lo que dijiste.”

"No es nada.”

¿Por qué Dylan me pide que lo vea?

"...Lo siento, pero tengo algo que hacer.”

"Entonces, ¿puedes decirme cuándo puedes conocerlo?"

Un noble no puede mantener su tiempo en el horario de la criada.

¿Quiere conocerme?

¿Por qué?

"¿Por qué me llama el Joven Maestro de Herthas?"

"...Yo tampoco lo sé.”

"Ya veo. Debería ir si el Joven Maestro me llama, pero no creo que pueda ir a menos que haya una buena razón.”

El sirviente parecía sorprendido porque no tenía ni idea de que le devolvería la respuesta de rechazo.

"No creo que al Marqués le gustaría que tuviera una reunión personal con otro hijo aristocrático. Espero que lo entiendas:”

"Criada Rosie, no..."

"Lo siento. Me retiro.”

El sirviente dijo algo y trató de agarrarme, pero actué como si no lo hubiera oído y me escapé.

"Tendré problemas si veo a Dylan.”

No quiero más problemas.

Pero Dylan era más persistente de lo que pensaba.

Fue por la tarde.

No tenía nada que hacer como criada exclusiva cuando Richard entró en la sala de castigos.

Así que pasé tiempo con el chef en la cocina después de mucho tiempo.

El chef me dio el postre sobrante porque pensó que lo estaba pasando mal. Estaba feliz y me comí todo el postre.

Pero luego, escuché una conmoción fuera de la cocina.

"He oído que hay una criada llamada Rosie aquí, ¿verdad?"

...Maldita sea.

Esa voz era definitivamente Dylan.

Miré al chef con los ojos temblorosos.

Pero el chef no parecía entender mi llamada de ayuda. Maldita sea.

Miré a mi alrededor a toda prisa. Necesito un lugar donde esconderme, un lugar donde esconderme.

Rápidamente agarré un tazón de plástico grande y me escondí en la esquina de la cocina.

"...¿Qué estás haciendo, Rosie?"

El chef se sintió desconcertado cuando de repente hice algo extraño.

"Jefe, por favor, escóndeme. Si esa persona entra y me encuentra, ¡por favor, di que no lo sabes incondicionalmente!"

"¿Por qué?"

"Lo harás, ¿verdad?"

"Sí, sí. No lo dejaré entrar en absoluto".

El chef parecía inestable, pero salió de la cocina como si me hiciera un favor.

"Escuché un ruido fuerte y vine a comprobarlo. ¿No eres un invitado de Herthas? ¿Qué pasa?”

"He oído que hay una criada llamada Rosie aquí, ¿verdad?"

"Es cierto que Rosie acaba de llegar, pero ahora no está aquí.”

¡Chef, gracias!

Lloré por el chef en mi corazón.

“¿En serio? Entonces, ¿a dónde fue?"

"No lo sé..."

"Así que no lo sabes.”

Parecía que las cosas iban bien. Pero en el momento en que estaba a punto de tomar el tazón en paz.

"¿Puedo ir a la cocina y comprobarlo yo solo?"

Dylan lanza la bomba.

¿Qué está diciendo ahora?

"¡No puedes!"

"¿Por qué?"

"La cocina es un lugar donde se sirven comidas al marqués, por lo que debe mantenerse limpia en todo momento. Así que no podemos dejar entrar a personas ajenas.”

La razón por la que se esforzaba tanto por evitar que Dylan entrara era tan fuerte que se sentía como si fuera un chef que amaba mucho su cocina.

Parece que no es tan importante como otras cosas.

"...Ya veo. Me voy.”

Afortunadamente, Dylan no era más terco.

Cuando se fue, suspiré aliviada y me quité el tazón.

...Pero, ¿por qué de repente me busca?

Espero que nunca vuelva.

Pero mi deseo nunca podría hacerse realidad. Esto fue solo el principio.

A partir del día siguiente, el infierno realmente se desarrolló.

Dylan empezó a buscarme en serio.

*****

Todo estaba oscuro.

Era una habitación que mostraba traumas.

Richard estaba aturdido.

¿Tiene algo llamado trauma?

No fue porque fuera mentalmente fuerte o porque tuviera una mente sana.

Aun así, muchos de sus recuerdos no estaban muy claros.

Sus recuerdos estaban dispersos.

Perdió sus propios recuerdos de la infancia y algunos de su crecimiento.

El punto en el que sus recuerdos comenzaron y continuaron fue bastante reciente.

Pero el trauma...

En un patio, donde no conoce su identidad porque no tiene recuerdos...

Richard se rió. Por alguna razón, esta situación se sintió insignificante.

La magia entró en la mente de Richard y trajo a relucir el trauma por el que había pasado.

A pesar de que no recordaba nada, una sensación extraña, dolorosa, enojada e indefensa le llenó la garganta.

Ese fue el comienzo del infierno.

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