Regresión Inútil Novela capítulo 35

Un mercenario era alguien que buscaba oportunidades. Lo que importaba era qué oportunidad daba la mejor ganancia.

No confiaban en sus compañeros. Por lo general, las recompensas se dividían entre el número de personas, y había muchos que pensaban en matar a los demás para quedarse con todo.

Sungmin lo sabía. En esa solicitud de subyugación con Heelong, Wangpe, Do Sangrang y Renis, Sungmin no confiaba en ellos. Le pidieron ayuda para su misión, pero no los consideraba compañeros.

Si muestran debilidad.

Si intentan algo.

Cualquiera podía traicionar. Eso también era cierto para Sungmin. Eran cuatro, él solo. Los números estaban en su contra y podían ponerlo en una mala situación. Sungmin lo sabía.

Aun así.

La aldea de los orcos estaba en lo profundo del bosque. Estaba más lejos que la aldea de los goblins, por lo que tendrían que caminar cerca de medio día.

Una técnica de velocidad aceleraría el viaje, pero los artistas marciales no la usaban. Podía adivinar la razón.

No eran tan fuertes. Eun Heelong parecía el mejor, pero apenas era de segunda categoría. No tenía mucha fuerza interna y no era lo suficientemente hábil como para correr usando una técnica a través del laberíntico bosque.

Así que el grupo caminó rápido. Para ahorrar energía para la pelea.

Caminando con ellos, Sungmin obtuvo un poco de información. Descubrió que Heelong actuaba como el líder.

Y otra información. El afiliado del gremio era Do Sangrang. No sabía cuál era su rango, pero Sungmin estimaba que estaría entre D y E. Los artistas marciales de segunda categoría solían estar en ese nivel.

Sungmin tenía una fuerza similar, pero era de rango C. La única razón por la que tenía ese rango era por su experiencia. La experiencia que le faltaba a Do Sangrang probablemente lo colocaba, como mucho, en el rango D.

La maga Renis también estaba en el gremio. Por la forma en que hablaban entre ellos, probablemente eran del mismo rango.

Wangpe no hablaba mucho. Sungmin no pudo obtener mucha información sobre él. Pero, por la forma en que se dirigía a Heelong, parecía que Wangpe y Heelong tenían algún tipo de relación previa a esa misión.

Los dos sin clase.

No se presentaron ni hablaron. Solo seguían detrás. Como su título de porteadores sugería, cargaban bolsas pesadas. Parecían bolsas destinadas a transportar botines que no cabían en el bolsillo interdimensional.

—Ha… ha…

—¡Ugh! ¡Ugh!

Los sin clase estaban sin aliento. Era natural. Caminar por el bosque no era tarea fácil. El sol estaba increíblemente caliente. Incluso los artistas marciales sudaban. Para los sin clase, debía ser extremadamente difícil.

Sin embargo, a nadie le importaba. Solo miraban hacia atrás de vez en cuando para asegurarse de que seguían el paso y les gritaban si se quedaban atrás.

—¿Qué tal si descansamos un poco?

Sungmin finalmente habló.

—Preocuparnos por ellos solo nos retrasará. No podemos dejarlos atrás, y hemos estado caminando un buen rato. Creo que lo mejor es tomarnos un descanso.

—Creo que tienes razón.

Heelong estuvo de acuerdo. Fueron a la sombra de unos árboles y descansaron. Los sin clase intentaron recuperar el aliento.

—Idiotas.

Do Sangrang murmuró. A su lado, Renis se sentó. Sacó un pequeño bolsillo. Era del tamaño de los que tenía Sungmin.

¿Ese es el bolsillo que proporciona el gremio?

Era un gran bolsillo interdimensional. Aunque su tamaño era pequeño, la magia que lo encantaba probablemente era incomparable a la suya.

Sacó algunos alimentos del bolso. Los sin clase sacaron su propia comida y comenzaron a masticarla.

Sungmin mordió el pan que Renis le había dado. Estaba caliente y esponjoso, como si acabara de hacerse.

—¿...ellos también están en el gremio?

—¿Hmm?

Renis inclinó la cabeza. Sungmin señaló a los sin clase.

—Ah, ¿Esos tipos? Sí. Están afiliados al gremio, pero no son mercenarios.

Renis respondió.

Un mercenario aprendiz. Básicamente, alguien que no podía aceptar trabajos por su cuenta. No recibían rango ni beneficios por las recompensas.

Existían solo para ser trabajadores fáciles de mandar. Se les usaba en misiones como esa y en otras tareas menores dentro del gremio.

Probablemente ingresaron, pero no tenían la habilidad suficiente para obtener un rango. Así que se convirtieron en aprendices de mercenario.

El trato hacia los mercenarios de bajo rango no era bueno. Para los aprendices sin rango, era aún peor. Eran maltratados y golpeados en cualquier momento.

Sungmin comenzó como mercenario de rango G. Pero fue golpeado y herido a diario. Los golpes y los insultos eran tan constantes que, cada día, Sungmin pensaba en el suicidio.

Traducido por: Valiz

◈❖◈

Si te gustó, Puedes apoyarnos aquí ~  [http://www.paypal.com/paypalme/MangoNovelas]

http://www.paypal.com/paypalme/MangoNovelas

Tambien contamos con página de facebook ~ [https://www.facebook.com/MangoNovelas]

https://www.facebook.com/MangoNovelas

Tambien visítanos en TikTok ~ [https://www.tiktok.com/@mangonovelas]

https://www.tiktok.com/@mangonovelas